Niño Elián González habla con Castro por teléfono
6 de diciembre de 2007, 09:32 PM
LA HABANA (AP) - El joven cubano Elián González, quien hace ocho años se convirtió en el centro de una disputa entre Estados Unidos y Cuba por su custodia, habló el jueves con el mandatario Fidel Castro.
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Elián cumplió 14 años y Castro lo llamó por teléfono.
"Quiero aprovechar la oportunidad para decirles que acabo de hablar con el comandante... y transmirle al pueblo de Cuba que se siente muy bien, sé que esto los llena de placer a ustedes tanto como a mí", dijo el muchacho ante las cámaras de la televisión estatal.
Castro, de 81 años de edad, convalece de una serie de operaciones intestinales que lo alejaron del poder en julio del 2006.
El mandatario delegó el poder en su hermano Raúl Castro y desde entonces no se le ha visto en público.
El 6 de diciembre de 1999 comenzó una batalla legal y política que involucró a millones de cubanos y al propio líder barbado en apoyo de Juan Miguel González, padre del entonces pequeño Elián, quien era retenido por unos tíos en Estados Unidos tras un naufragio en el que murió su madre.
Marchas y todo tipo de actividades acompañaron a la campaña jurídica y de opinión pública en Estados Unidos, que en el plano interno se tradujo en una serie de planes de fortalecimiento del sistema comunista y sus prestaciones: salud, educación y seguridad social entre otros, muy deteriorados durante la crisis económica de la década de 1990.
Castro la llamó entonces la "batalla de ideas", bajo el argumento de que sólo un pueblo fortalecido ideológicamente, pero en franca mejoría de sus condiciones de vida puede resistir los intentos de Estados Unidos de llevar a la isla a un régimen capitalista.
El jueves por la tarde, un mitin encabezado por el presidente del parlamento, Ricardo Alarcón, en la ciudad de Cárdenas a 150 kilómetros de la capital, recordó el octavo aniversario de esta "batalla de ideas" y de la campaña para traer a Elián de regreso a Cuba, ahora convertido en un adolescente.
Alarcón tuvo a su cargo las palabras centrales del acto, que contó en primera fila con los protagonistas, Elián, su padre y su familia.
"Fidel sigue al frente de esta batalla a la que dedica las mejores horas de su día", dijo el legislador, un colaborador cercano de Castro y experto en las relaciones con Estados Unidos.
Alarcón hizo énfasis en los cambios sufridos por Cuba desde la década de 1990, las mejoras en las condiciones de vida de la población; pero insistió en la necesidad de avanzar en el combate de fenómenos tales como la corrupción o la rutina.
En los últimos tiempos, el mandatario interino Raúl Castro convocó a los cubanos _en medio de toda suerte de especulaciones sobre el futuro de la isla y la viabilidad de su sistema_ a realizar las críticas y reformas necesarias para Cuba.
En su discurso, Alarcón volvió sobre este tema.
Debemos "cambiar todo lo que deba ser cambiado, rectificar todo lo que deba ser rectificado... hay dos cosas que no vamos a cambiar la independencia absoluta de la patria... ni tampoco cambiaremos nuestro socialismo", señaló.
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