Un breve comentario:
La tesis que plantea Vladimiro Roca de que primero tiene que venir los cambios economicos y el hecho de que Carlos Saladrigas, su mayor exponente en el caso de Cuba da mucho que pensar. Si para Vladimiro lo mas importante es la comida y para Saladrigas lo que el puede comer, esto explica su oposicion al embargo y a la postura de cambio en nuestro pais promulgada por el presidente de los Estados Unidos, George W. Bush. En estos momentos cruciales que atraviesa el castro-comunismo en Cuba pedir o enfocar el lente en "cambios economicos" es darle al regimen el empujon necesario para su continuidad. Lo que da a entender que solo buscan un espacio dentro del regimen para su sustento ya que sus tesis pierde valor frente al hecho de la ayuda masiva que recibe el castrismo desde Espana y Venezuela.?Donde esta la mejoria en el cubano? Paya ha sido un exponente de esta tesis. Que ahora diga que hay que olvidar el pasado para enfocar el "futuro' habria que preguntar ?cual futuro?, ?el de buscarse un espacio dentro del regimen? ?Por que no el cambio de regimen? ?Por que no el futuro que avisoran otros grupos? ?por que el de el solamente? Lo mas importante de esta nota lo dijo Carles Llorenz, aunque cometiendo una barrabasada al otorgarle al castrismo una genesis "democratica" que nunca tuvo. Siguen tratando de salvar al socialismo culpable del egendro comunista. Llamarle fascista a los comunistas es pasarle la mano aunque con ello tenga que admitir Llorenz que Pinochet fue menos nefasto para Chile. ?Se diria lo mismo si, digamos, los alzados del Escambray hubiesen derrocado a los tiranos de Biran? ?O si Franco hubiese perdido la guerra? !hay Espana, que mala memoria tienes! El regimen se desploma y algunos disidentes tambien.
Juan Cuellar
Exiliados cubanos de todo el mundo se citan en BCN
• La disidencia interior asume por vía telefónica el protagonismo del acto
• Payá pide unidad ante el futuro pese a las discrepancias sobre el pasado
JORDI CORACHÁNBARCELONA
El Periodico
Barcelona fue ayer la capital de la oposición cubana. Vinieron gentes de todas partes del mundo, menos de Cuba. La oposición interna tuvo que intervenir desde la isla mediante conferencia telefónica. El motivo del encuentro fue la presentación del libro Dissidents (Dèria y La Magrana), de Carles Llorens y Clàudia Pujol.Llegaron al Hotel Pulitzer para deshacer tópicos, pero cayeron en uno: "Fidel Castro es para muchos todavía intocable". Eran opositores cómodos y acomodados, como admitió ante la prensa catalana Carlos Saladrigas, líder moderado del exilio de Miami, uno de los 13 entrevistados en el libro.Quizá por eso, los testimonios más sentidos llegaron por un teléfono conectado a un gran altavoz. Sabias las palabras del disidente Oswaldo Payá. "Todos los opositores tenemos que ponernos de acuerdo sobre el futuro, aunque discrepemos del pasado", pidió desde La Habana, tras reclamar elecciones libres y la excarcelación de presos.De su preso particular habló Laura, la esposa del periodista Héctor Maseda, de 65 años, que lleva cinco en la cárcel por escribir lo que escriben los periodistas en cualquier país libre. Solo que Cuba no lo es y la ley de la mordaza le condenó a 20 años.Por teléfono también habló Vladimiro Roca, hijo díscolo del secretario general de los comunistas cubanos. "La transición no se ve cerca", dijo. Por eso, reclamó moderación a los opositores del exterior: "Primero hay que hacer cambios económicos, porque la presión ciudadana se encargará de lo demás". También se refirió a los hermanos Castro: "Raúl es distinto pero, mientras viva Fidel, no va a hacer nada que le moleste".Consenso en la sala. Saladrigas aceptó dar todo el protagonismo a la oposición interna por "valiente y democrática". El encuentro estuvo presidido por las reivindicaciones democráticas desde la templanza y la sensatez. Solo descolló la voz de Carles Llorens, quien dijo que "en Cuba no hay socialismo, sino fascismo", y comparó a Fidel Castro con Hitler. "Es verdad que Fidel se levantó contra una dictadura y que Pinochet lo hizo contra una democracia, pero al final el comandante ha sido más nefasto que el general", dijo.
• La disidencia interior asume por vía telefónica el protagonismo del acto
• Payá pide unidad ante el futuro pese a las discrepancias sobre el pasado
JORDI CORACHÁNBARCELONA
El Periodico
Barcelona fue ayer la capital de la oposición cubana. Vinieron gentes de todas partes del mundo, menos de Cuba. La oposición interna tuvo que intervenir desde la isla mediante conferencia telefónica. El motivo del encuentro fue la presentación del libro Dissidents (Dèria y La Magrana), de Carles Llorens y Clàudia Pujol.Llegaron al Hotel Pulitzer para deshacer tópicos, pero cayeron en uno: "Fidel Castro es para muchos todavía intocable". Eran opositores cómodos y acomodados, como admitió ante la prensa catalana Carlos Saladrigas, líder moderado del exilio de Miami, uno de los 13 entrevistados en el libro.Quizá por eso, los testimonios más sentidos llegaron por un teléfono conectado a un gran altavoz. Sabias las palabras del disidente Oswaldo Payá. "Todos los opositores tenemos que ponernos de acuerdo sobre el futuro, aunque discrepemos del pasado", pidió desde La Habana, tras reclamar elecciones libres y la excarcelación de presos.De su preso particular habló Laura, la esposa del periodista Héctor Maseda, de 65 años, que lleva cinco en la cárcel por escribir lo que escriben los periodistas en cualquier país libre. Solo que Cuba no lo es y la ley de la mordaza le condenó a 20 años.Por teléfono también habló Vladimiro Roca, hijo díscolo del secretario general de los comunistas cubanos. "La transición no se ve cerca", dijo. Por eso, reclamó moderación a los opositores del exterior: "Primero hay que hacer cambios económicos, porque la presión ciudadana se encargará de lo demás". También se refirió a los hermanos Castro: "Raúl es distinto pero, mientras viva Fidel, no va a hacer nada que le moleste".Consenso en la sala. Saladrigas aceptó dar todo el protagonismo a la oposición interna por "valiente y democrática". El encuentro estuvo presidido por las reivindicaciones democráticas desde la templanza y la sensatez. Solo descolló la voz de Carles Llorens, quien dijo que "en Cuba no hay socialismo, sino fascismo", y comparó a Fidel Castro con Hitler. "Es verdad que Fidel se levantó contra una dictadura y que Pinochet lo hizo contra una democracia, pero al final el comandante ha sido más nefasto que el general", dijo.
Noticia relacionada a este tema: libro-dissidents-carles-llorens-claudia-pujol-recoge-13-voces-contrarias-regimen-fidel
No comments:
Post a Comment