Sunday, December 3, 2006

Los chávez, la "familia real" de Barinas

La familia de Chávez tienen enorme influencia en Venezuela

http://www.elheraldo.hn/nota.php?nid=63003&sec=2&fecha=2006-12-03

Caracas, Venezuela. Barinas, la cuna que vio nacer al líder bolivariano Hugo Chávez, es la tierra menos revolucionaria de Venezuela. Allí, en los inmensos llanos al pie de los Andes, donde el sol es tan excesivo como algunos de sus hijos, se ha instaurado una monarquía de nuevo cuño: los Chávez.

El padre del presidente se llama Hugo de los Reyes y es la máxima autoridad, el gobernador del estado. Elena Frías, la madre, dirige la millonaria Fundación del Niño. Argenis Chávez, uno de los cinco hermanos de Hugo, ejerce como vicegobernador en la sombra.

Adelis es el banquero de la familia (vicepresidente ejecutivo de Sofitasa) y director de la Copa América 2007 de fútbol. "Nacho" dirige el convenio de salud con Cuba. Aníbal es el alcalde de Sabaneta, pueblo natal del presidente. El poder político y económico de Barinas ha cambiado de manos por obra y gracia de la revolución.

Las acusaciones de nepotismo y corrupción acompañan a la "familia real". Hugo de los Reyes, el maestro, ha olvidado estrechuras económicas de días pasados y maneja presupuestos millonarios a golpe de decretos de emergencia, más de 100 en la legislatura. "Ha adjudicado a dedo 200 millones de euros, unos cinco mil millones de lempiras.

La mayoría al entorno de Argenis". El abogado Omar Morales es el látigo de la "familia real". Ha presentado 16 querellas ante la Fiscalía por nepotismo y malversación de fondos públicos. "Mientras el presidente habla de socialismo, su familia practica el capitalismo más clásico".

Hugo de los Reyes arrastra cansancio, las elecciones desgastan a cualquiera. Le cuida muy de cerca el cardiólogo cubano Héctor Vera, un regalo de Fidel Castro , ataviado con una camiseta (que dice "El bravo pueblo vota por Chávez") que no permite dudas sobre su compromiso. "Cada tres meses viajamos a La Habana, para vigilar el accidente vascular que aquejó al gobernador".

El padre del presidente tiene 73 y muchas batallas en el cuerpo. Elena Frías vive una segunda juventud. A golpe de bisturí, uno de los mejores amigos de la mujer venezolana. Le gustan las joyas, las marcas de lujo y las gafas Dolce Gabanna .

En una tierra donde el machismo se luce con orgullo, Frías ha evitado los ataques directos de la oposición, tan galantes ellos. Pero sí sufre los chistes a costa de su querencia por el quirófano. "Otra obra del maestro Chávez", repiten con sorna empleando las mismas palabras que la publicidad institucional.

Doña Elena no se inmuta. Es la más guerrera de la familia. Lleva la voz cantante en las reuniones y corrige las respuestas de su marido.

- Los acusan de enriquecimiento.

- Estas acusaciones injustas nos hieren mucho. Deploramos la guerra sucia que ha emprendido la oligarquía contra la revolución. Pero estamos llenos de fe y sabemos que el pueblo no los escucha.

Dicen que la fe es creer en lo que no se ve. Y, según la oposición, lo que se ve es evidente. La pequeña finca La Chavera ha crecido sin parar . "Y hay más, como Laberinto, con 900 hectáreas dedicadas a la ceba del ganado. La Espoleta, un criadero. Y San Judas Tadeo". Las acusaciones son de Antonio Bastidas, ex diputado opositor que creció junto a los Chávez. "Y las que no se conocen porque las manejan los testaferros de Argenis".

Las fincas de los Chávez y de sus amigos están indultadas. Jamás correrán la misma suerte que otras haciendas invadidas y expropiadas por el gobierno. Como La Marqueseña, que ya no pertenece a sus dueños y que se ha convertido en el símbolo chavista de la reforma agraria.

Más contradicciones en la cuna de la revolución.

Todo el mundo sabe que quien mueve los hilos del gobierno es Argenis, apodado el Colin Powell de Barinas por su cargo de secretario de Estado, inventado para él y sin parangón en el resto del país, y su tez morena.

Hoy preside un acto de resistencia indígena en un teatro lleno de seguidores. Argenis es el elegido por doña Elena para suceder a su padre. Solo falta el visto bueno de Hugo. Y ese hay que ganárselo. Un columnista antigubernamental escribió en Caracas que Hugo y Argenis habían mantenido una agria discusión en la última reunión familiar en La Chavera.

El presidente echó en cara a su hermano el vehículo último modelo que exhibía. Incluso la emprendió a golpes contra el coche. "Y no es la primera vez", añade Bastidas con la rotundidad del que todo lo quiere saber.

Fincas, coches de lujo, tren de vida... Incluso varios sobrinos del presidente estudian en Santa María, la universidad privada más cara de Barinas. Mientras, el presidente apuesta por las universidades bolivarianas y amenaza con acabar con los centros privados.

Adelis Chávez es el banquero de la familia revolucionaria.

Además, tiene un reto: la Copa América 2007 de fútbol. De momento, las cifras también empañan su labor. No es cuestión de goles, sino de 40 millones de euros, unos mil millones de lempiras, el presupuesto inicial para la remodelación del estadio local, adjudicado a dedo a una empresa cercana.

A Adelis no le preocupan las críticas por un dispendio económico que duplica al de otros estadios. Se viste con chándal para posar junto a Duramel, portero de la selección, en el renovado césped. Y como si fuera un central clásico, se defiende con contundencia: "La FIFA nos obliga a estos desembolsos. Pero la oposición no quiere reconocer nuestros logros". Como dicen en Barinas: ellos se despachan y se dan el vuelto.

Hugo, Adán, Argenis, Aníbal, "Nacho", Adelis... doña Elena repasa las fotos familiares en la residencia oficial del gobernador. "Esta en la que estamos todos es del día después de la juramentación de Hugo Rafael en el 98. Teníamos más, pero mi hijo es un desastre. Un día las llevó a la televisión y desaparecieron".

Cookie, el caniche de la familia, hace su entrada en la casa. Un escolta le ha sacado de paseo. Al fondo, un hombre sin camisa dialoga con unos visitantes. Parece que está en su casa. Y así es. "Nacho" Chávez vive entre Barinas y Barinitas, dirigiendo la campaña electoral. "Yo estoy donde me pone la revolución".

"Nacho" supervisó el convenio de salud con Cuba, "gracias al cual hemos atendido a 20,000 pacientes por toda clase de patologías y a 200,000 en la Operación Milagro, por cataratas en su mayoría. En todos los municipios hay un médico cubano, 35,000 en total".

¿Corrupción? "Quien no la debe, no la teme.

En otros gobiernos, familiares y amigos del presidente viajaban por todo el mundo, en los mejores hoteles, con tremendos yates. Nosotros trabajamos de la mañana a la noche, como nuestro hermano. Y lo más hermoso como creyentes es que Dios nos lo distribuye en salud y fortaleza".

La sombra del presidente es alargada. Tanto como la del gigantesco muñeco hinchable instalado en una rotonda de Barinas. Imponente, vestido de rojo, el Chávez de plástico pareciera vigilar todo lo que ocurre en su tierra. Pero cuando llega la noche, el muñeco también se va a descansar. Un niño toma una foto con su móvil. "Lo guardan para que no se lo lleven los 'escuálidos' (la oposición)", dictamina sin la menor inocencia. ¿Los 'escuálidos'? "Sí, son el diablo".

En la Venezuela de hoy, amores y odios no saben de medias tintas ni de equidistancias. Y en Barinas, tierra exagerada, incluso les ha surgido su propia guerrilla. Las Fuerzas Bolivarianas de Liberación (FBL) han marcado su territorio, a fuerza de pintadas, desde la capital hasta la frontera. Nacidos tras el golpe fallido de 2002, la oposición acusa al gobierno: "Son su brazo armado, surgieron para defender a Chávez, que no se fiaba del ejército".

Un centenar de hombres vive refugiado en la reserva de La Gabarra. Roban, secuestran, extorsionan y obligan a votar por partidos chavistas. Para la administración no existen, pese a que organizan actos públicos.

En el último volvieron las amenazas: "Nos bañaremos en una piscina llena de sangre". El desconocido inventor del FLB ha perdido el control de sus guerrilleros, dedicados al pillaje. Más violencia para un país que ha sufrido 90,000 asesinatos en los ocho años de gobierno revolucionario. Sangre para llenar muchas piscinas.

En los llanos, tierra de revolución, les ha surgido su propia Monarquía. No es un relato de García Márquez. Es la Venezuela de Chávez.

1 comment:

Anonymous said...

moet controleren:)