El Periodico
Raúl Castro gestionó el viaje del médico con la embajada cubana
• El cirujano trató a Antonio Gades, quien lo presentó al hermano de Fidel
• El doctor enmarca su visita al presidente en La Habana en el terreno personal
Un hombre circula en bicicleta por una calle de La Habana, ayer, ante un cartel de apoyo a Fidel Castro. Foto: EFE / ALEJANDRO ERNESTO MÁS INFORMACIÓN
El cirujano español dice que Fidel se recupera de forma "paulatina"
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Un médico español en Cuba
MARGARITA SÁENZ-DIEZ / JORDI CORACHÁN
MADRID / BARCELONA
La familia de Fidel Castro decidió pedir la opinión del médico español José Luis García Sabrido. Fue el propio Raúl Castro, actual presidente en funciones y hermano del máximo mandatario cubano, quien solicitó a la Embajada de Cuba en España que contactara con el cirujano para que se desplazara lo antes posible a la isla con el propósito de hacer un reconocimiento a fondo a Fidel Castro, según ha podido saber EL PERIÓDICO --que desveló la noticia el pasado domingo-- de fuentes sanitarias.
La relación de García Sabrido, jefe de cirugía del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, con la familia Castro no es nueva. García Sabrido fue médico del bailarín y coreógrafo Antonio Gades --que en realidad se llamaba Antonio Esteve Ródenas--, quien falleció de cáncer el 20 de julio del 2004, a los 67 años, en una habitación del Gregorio Marañón. Fue Gades, militante comunista, quien invitó al médico madrileño a visitar Cuba y quien le introdujo en los círculos de la política y la medicina de Cuba, hasta presentarle a Raúl Castro. Gades recibió de manos de Fidel Castro la Orden José Martí, máxima condecoración de la República de Cuba.
MEMBRETE DEL HOSPITAL
Gades dejó instrucciones para que sus cenizas fueran trasladadas a Cuba y entregadas a su amigo Raúl Castro. "Haga con ellas lo que usted crea conveniente", escribió Gades en una hoja con membrete del hospital Gregorio Marañón. Raúl Castro ordenó que fueran depositadas en el Mausoleo de los Héroes de la Revolución, en Sierra Maestra.
Las fuentes consultadas aseguraron que las autoridades cubanas quedaron muy impresionadas por el tratamiento que García Sabrido prescribió a Gades, "porque le alargó la vida algunos años". El cirujano español pasó a ser una persona muy admirada en la isla, por sus "milagros" en medicina, y sus posiciones políticas de izquierdas, aunque no comunistas. El médico fue un estrecho colaborador del socialista Pedro Sabando Suárez, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid entre 1987 y 1995, y fue consultado varias veces por La Moncloa, en la etapa de Felipe González como presidente (1982 a 1996).
Las relaciones fueron en aumento en los últimos cinco años. García Sabrido eligió varias veces las playas cubanas para desestresarse, junto con su familia, del frenético trabajo en el Gregorio Marañón. También, participó en varios simposios. La última vez fue entre los pasados 7 y 10 noviembre, con motivo del Noveno Congreso Cubano de Cirugía.
Por todo esto, García Sabrido quiso dejar claro ayer ante la prensa que su visita a Castro había que enmarcarla en la esfera estrictamente personal. Esas relaciones "incluyen a la familia Castro, que me permite acceder con facilidad a su amistad y a su reconocimiento de Fidel)", declaró. Otras fuentes sanitarias precisaron que fue el propio Raúl Castro quien reclamó sus servicios por tratarse de "un excelente cirujano" y una "persona de confianza". La Embajada de Cuba en España agradeció al Gobierno español las facilidades.
VIEJOS CONOCIDOS
Además, el jefe de cirugía del Gregorio Marañón confirmó ayer ante los periodistas que su relación con el equipo médico de Castro no data de ahora, sino que son "viejos conocidos" de varios años, y defendió que la salud de Castro se encuentra "en manos de excelentes profesionales".
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