Escalada represiva

Leonel Alberto Pérez Belette

LA HABANA, octubre (www.cubanet.org) - El régimen cubano no ha desechado los actos represivos en contra de los directivos, miembros y simpatizantes del Partido Liberal Nacional Cubano (PLNC), según dijo a este reportero el presidente de la entidad, León Padrón Azcuy. Esta organización forma parte de la Unidad Liberal de la República de Cuba.

En esta ocasión, la víctima fue el delegado del PLNC en Holguín, Pedro Terrero Leiva.

El pasado 26 de septiembre, Terrero Leiva, quien reside en el municipio Moa, fue obligado a presentarse en la estación policial del pueblo cuando llegó procedente de otra región del país. Allí fue interrogado por un oficial de la policía política, de apellido Soto.

Durante el interrogatorio a Terrero Leiva le propusieron un buen empleo si dejaba su cargo en la organización. Ante la negativa del opositor, pasaron a amenazarle con llevarlo a juicio e imponerle una condena de 25 años de privación de libertad por sus actividades contestarías.

Al tiempo que esto ocurría, otro miembro del PLNC fue citado, interrogado y amenazado en el municipio Jibara, también en Holguín. Se trata del activista Miguel Batista Meriño, quien se negó a firmar a las autoridades un acta de advertencia, previa a la apertura de un expediente judicial en su contra por el presunto delito de peligrosidad social.

En Cuba las clasificaciones jurídicas, como la peligrosidad social, entre otras causas comunes, les son impuestas habitualmente a muchos opositores. En gran medida, debido a que el Código Penal vigente no reconoce la existencia del delito político. En el caso específico de la peligrosidad social, los tribunales se apoyan para emitir una sentencia condenatoria, en la presunción de que un individuo que no ha cometido delito alguno, podría delinquir en el futuro.

Ambos opositores dijeron estar dispuestos a asumir los riesgos que conlleva la lucha pacífica por la libertad propia, la democratización, el respeto a los derechos civiles y la divulgación de las ideas liberales dentro de la Isla.

Como antecedentes a estos hechos represivos contra el PLNC en lo que va de mes, han sido hostigados varios miembros del Partido, incluido su vicepresidente, Silvio Benítez Márquez.

Aún permanecen detenidos en la prisión El Guayo, en Isla de de la Juventud, los activistas Adel Ramón López Nápoles y Santos del Pozo Rodríguez, quienes fueron trasladados a dicho recinto penitenciario el 22 de septiembre, por el presunto delito de intento de salida ilegal del país.