Monday, January 14, 2008

Las mismas mentiras "socialistas-comunistas de siempre

En su biografia, el santo Antonio Maria Claret, nombrado Arzobispo de Santiago de Cuba y Camaguey en Octubre de 1850, nos menciona como los socialistas propagaban en las provincias de Andalucia los engan~os. Claret se quejaba de como no se les daba una respuesta al dan~o que cometian impunemente: "Y mientras los unos han dormido, los otros han sembrado la cizaña en aquel hermos campo" decia Claret acerca del incanasable animo de destruccion del socialismo-comunismo. A continuacion Claret enumera las mentiras socialistas y solo cabe observar que las mismas siguen siendo el caldo de cultivo de los izquierdistas de hoy. Los mismos lobos con el mismo mensaje. La similitud con Con el regimen de CASTRO ES SUPERLATIVA.

Juan Cuellar




Extraido de la autobiografia de Antonio Maria Claret que puede leerse apretando aqui

Capítulo III

De los daños y errores que los protestantes y socialistas han causado y sembrado en las provincias de Andalucía
717. De algunos años a esta parte ha habido mucha apatía, tanto de parte de los gobernantes como de parte de los eclesiásticos; y los socialistas y los protestantes han sabido aprovechar bien la ocasión. Y mientras los unos han dormido, los otros han sembrado la cizaña en aquel hermoso campo. De todos es sabida la sublevación de Loja y la multitud de afiliados que tenía, que los alistados no bajaban de ochenta mil. También sabemos que para sofocarla fue preciso derramar sangre y desterrar a muchísimos, y gracias al viaje que hizo S. M., que por el indulto general que dio pudieron volver al seno de sus familias. Por documentos oficiales consta que los encausados por consecuencia de dichos acontecimientos de Loja fueron mil ciento ochenta y tres = 1183, de los cuales 387 eran solteros, 720 casados, 76 viudos.

718. Los medios de que se valieron fueron muchos, pero los principales fueron dinero, libros, papeluchos y charlatanes propagandistas, y además se valían de la violencia, pues que el que no se alistaba le perseguían, le impedían su labor y le hacían perecer de hambre. Durante el tiempo de nuestro tránsito y permanencia tuve la curiosidad de notar algunos de los errores que por aquellas tierras se habían diseminado, que anotaré aquí brevemente. Decían:

719. «1.° Que el hombre no debe reconocer a otro padre ni a otra madre que la tierra, porque los hombres son como los hongos y las setas, etc. Sin contar con Dios para nada.

»2.° Que los hijos nada deben a sus padres, porque ellos sólo intentaban divertirse y si de su placer resultó el hijo, quizá fue contra su voluntad, tal vez tuvieron sentimiento por ello, y ¿quién sabe si intentaron el aborto? Y este lenguaje no sólo se hablaba en el seno de las familias, sino también en las calles, plazas, caminos y aún en los Tribunales».

720. «3.° Los Reyes, los Ministros, son unos tiranos; ellos no tienen ningún derecho a mandar a los demás hombres. Todos somos iguales.

»4.° La política es un juego para apoderarse del mando de la Nación, de los honores, de los intereses y demás de la sociedad.

»5.° No hay más ley que la del más fuerte».

721. «6.° La tierra es de nadie; de ella salen todas las cosas; las cosas son para todos y de todos».

«7.° Los ricos son unos bribones; unos ladrones, unos zánganos, que no hacen más que holgar, comer y lujuriar, y a la manera que las abejas se levantan contra ellos y quitan la vida a cuantos pueden coger, así los obreros se deben levantar y acabar con todos esos zánganos de la sociedad».

722. «8.° Hermanos, somos iguales, todos somos de una misma naturaleza; pero los ricos nos tratan como si fuéramos de naturaleza distinta e inferior a la suya. Sí, nos tratan como si ellos únicamente fueran hombres y nosotros como si fuéramos sus bestias de carga y de labor. Ellos no trabajan nunca, están continuamente holgando; ellos están andando divirtiéndose por los cafés, teatros, bailes y paseos, mientras que nosotros estamos continuamente trabajando. Ni siquiera nos dejan descansar en los días de fiesta. Ellos se escogen y se procuran los lugares más cómodos, por manera que se libran del calor en verano y del frío en invierno, y nosotros, además de la fatiga del trabajo, tenemos que sufrir los calores, fríos, vientos y lluvias en la intemperie, o metidos en las fábricas, sótanos y minas respirando aires crasos y malsanos; por manera que morimos antes de tiempo. Ellos cada día ponen en sus mesas muchos y regalados platos, y nosotros apenas podemos comer un pedazo de mal pan, que nos lo hacen pagar muy caro por los monopolios que hacen».

723. «Ellos visten ropas hermosas y finas, cada día mudan de traje, y cada vez más lujoso; y nosotros apenas nos podemos mudar nuestras camisas miserables, mojadas del sudor de nuestras fatigas».

724. «Ellos viven en grandes y magníficas casas, adornadas con un lujo asiático, y nosotros ya no podemos vivir en buhardillas y sótanos, porque han subido a tal precio los alquileres, que ya no podemos alcanzar a pagarlos. Nosotros edificamos las casas, les componemos los muebles, les hacemos sus vestidos, les preparamos sus comidas; pero ellos no nos dan nada, antes bien nos roban lo que ganamos y nos estrujan la sangre con alquileres, derechos y contribuciones. ¿Hasta cuándo han de durar esos robos e injusticias? Vamos todos contra ellos».

725. «9.° Hasta ahora, los ricos han disfrutado las tierras; ya es tiempo que las disfrutemos nosotros, y así entre nosotros las dividiremos. Esta división no sólo es de equidad y justicia, sino también de grande utilidad y provecho, pues que los terrenos aglomerados por los ricos ladrones son infructíferos, y divididos en pequeños lotes entre nosotros y cultivados por nuestras propias manos darán abundantes cosechas».

726. 10.° Además decía y repetía con mucha frecuencia el Herrador de Lola, Pérez del Olmo, el caudillo de los socialistas: Antes, los hospitales, casas de beneficencia, las comunidades religiosas, los cabildos, los beneficiados, etc., etc., tenían haciendas, posesiones y rentas, y esos bribones todo se lo han apropiado y hasta se han tomado los propios de los pueblos. Y de todas esas cosas no nos han dado nada. Justo es que nosotros reclamemos la parte que nos toca; el mismo derecho tenemos nosotros que ellos; y como ellos no nos darán nada, estamos en el caso de tomar lo que nos pertenece.

Unámonos, pues, todos, y levantémonos y manos a la obra.

727. Con esas peroraciones y con los demás medios tan halagüeños y fascinantes, ame(na)zando e insultando al que no cedía al momento , así fue como tomó tan grandes proporciones en tan poco tiempo.

Al propio tiempo que se sembraban tan males y destructoras doctrinas, se procuraba la inmoralidad, apartándolos de todas las cosas buenas y conduciéndolos a las malas. Ya no se recibían los Sacramentos de Penitencia y Comunión y Matrimonio; pero ni aún se oía la Misa; en las fiestas, hasta el mediodía en las labores, y por la tarde y noche, al juego, baile, teatro, café, taberna, paseo. Nada de Religión. Todo mundano. Los ministros de la Religión, despreciados, murmurados, calumniados, etc., etc.

728. Al saber yo todas esas iniquidades desde Madrid, el corazón se me partía de pena, deseaba ir allá a predicar; pero S. M. me decía que esperase, que ya predicaría cuando ella iría, y así ha sido. Pero no es esto bastante; es necesario que vayan Misioneros. Al efecto he hablado con los Prelados de aquellas tierras; el S. Nuncio de S. Santidad y la Reina han hablado y escrito cartas para que vayan allá misioneros, y espero que algunos irán, pero pocos, porque no hay sujetos. ¡¡¡Oh Padre celestial, enviad misioneros!!!...

No comments: