http://www.agroinformacion.com/leer-noticia.aspx?not=38699
[09/04/2007]
Un incendio forestal afectó unas mil hectáreas de pinos en el centro de Cuba
Las llamas recorrieron unos 10 kilómetros cuadrados del área forestal de Motembo.
Obligó a evacuar a unas 130 personas.
09. Abril ´07 - Un incendio de grandes proporciones fue extinguido en un área de la zona boscosa de Motembo, en la región central del Cuba, donde afectó a unas mil hectáreas sembradas de diferentes variedades pino, informaron la pasada semana medios oficiales.Las llamas recorrieron unos 10 kilómetros cuadrados del área forestal de Motembo (Villa Clara, unos 300 kilómetros al este de La Habana), según la oficial Agencia de Información Nacional (AIN).El Jefe del Cuerpo de Guardabosques de Villa Clara, Francisco Garcés, explicó que se ha abierto una investigación sobre las causas que provocaron el incendio, que ocasionó daños irreversibles a unas 324 hectáreas de plantaciones jóvenes, además del impacto negativo sobre el resto de los ecosistemas.El fuego, que obligó a evacuar a unas 130 personas, comenzó en la tarde del pasado sábado, en la zona conocida como Loma de Guillermo Yabre y se extendió rápidamente debido a los fuertes vientos, la presencia de maleza seca y la existencia de gas natural en esa región.De acuerdo con los últimos datos oficiales disponibles, los incendios rurales ocurridos en Cuba en el 2005 a causa de la sequía y por negligencia humana dejaron pérdidas que rondaron los 600,000 dólares.Entre febrero y mayo de 2006, la etapa crítica de riesgo de incendios en Cuba, tuvieron lugar 708 de esos siniestros, 139 menos que en igual periodo del 2005.
La verdad es la idea, decia Platón. Aristotele afirmaba que era la forma que se halla oculta tras el velo de la apariencia. Por Cuba y Para Cuba busca solamente la libertad en la palabra, no la libertad de palabras donde la ocultan los sofistas y, como no, los filosofos del infinito. La verdad se divide, se multiplica y se suma ella misma.
Monday, April 9, 2007
Cuba prohibe la entrada a Javier Sardá por criticar a Fidel Castro
http://www.elpais.com/articulo/gente/Cuba/prohibe/entrada/Javier/Sarda/criticar/Fidel/Castro/Cronicas/Marcianas/elpepugen/20070409elpepuage_10/Tes?print=1
Cuba prohibe la entrada a Javier Sardá por criticar a Fidel Castro en 'Crónicas Marcianas'
El periodista había pedido un visado para grabar unas imágenes de su nuevo programa 'Duti Fri'
AGENCIAS - Madrid - 09/04/2007
La Embajada de Cuba en España ha denegado el visado a Javier Sardá para viajar a la isla,
por las críticas que hizo contra el régimen castrista desde el programa Crónicas marcianas,
según ha informado hoy Telecinco en un comunicado.
Sardá está viajando por todo el mundo en busca de imágenes para su nuevo programa Duti fri.
Tras conocer que el Ejecutivo de La Habana no le deja entrar en la isla,
el periodista catalán ha manifestado que invitará personalmente a cenar a su casa
al embajador de Cuba, Alberto Velazco, y al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos,
que recientemente ha concluido una visita oficial al país, en un intento de normalizar
las relaciones políticas.
Sardá también ha declarado: "Deseo que cuando yo pueda entrar en Cuba sea
porque se haya convertido en un país libre, el señor embajador
también sea tolerado por el régimen democrático y pueda entrar en Cuba".
Cuba prohibe la entrada a Javier Sardá por criticar a Fidel Castro en 'Crónicas Marcianas'
El periodista había pedido un visado para grabar unas imágenes de su nuevo programa 'Duti Fri'
AGENCIAS - Madrid - 09/04/2007
La Embajada de Cuba en España ha denegado el visado a Javier Sardá para viajar a la isla,
por las críticas que hizo contra el régimen castrista desde el programa Crónicas marcianas,
según ha informado hoy Telecinco en un comunicado.
Sardá está viajando por todo el mundo en busca de imágenes para su nuevo programa Duti fri.
Tras conocer que el Ejecutivo de La Habana no le deja entrar en la isla,
el periodista catalán ha manifestado que invitará personalmente a cenar a su casa
al embajador de Cuba, Alberto Velazco, y al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos,
que recientemente ha concluido una visita oficial al país, en un intento de normalizar
las relaciones políticas.
Sardá también ha declarado: "Deseo que cuando yo pueda entrar en Cuba sea
porque se haya convertido en un país libre, el señor embajador
también sea tolerado por el régimen democrático y pueda entrar en Cuba".
Cuba, triste asignatura pendiente
Mis dudas desaparecieron cuando oí sus declaraciones en los informativos de Cuatro. Reconozco que no estaba mucho por la labor de escribir sobre Cuba y el viaje del ministro Moratinos. Quizá el cansancio que produce la heterodoxia, a veces tan antipática en las filas de la izquierda. Quizá el pesante silencio del pensamiento crítico, desaparecido en combate desde hace tiempo. Quizá el hecho de que a Moratinos ya le he dado mucho, convencida del bajo nivel de la política exterior española. Por cierto, me dicen que ya no es conocido con el mote de Desatinos, sino con otro de mayor definición, Blablatinos... En fin. Pero cuando oí a Julio Villarrubia, secretario general del Grupo Socialista en el Congreso, hablando de Cuba, la adrenalina se me activó por arte de estupefacción, y decidí que, una vez más, algunos, ni que sea desde modestos e ignotos rincones del pensamiento progresista, tendríamos que alzar la voz disidente. Villarrubia usó todos los eufemismos del diccionario para no utilizar la palabra dictadura, y sus dos frases más memorables fueron éstas: "En Cuba hay una situación especial, complicada y difícil" y "el Gobierno afronta las relaciones con la isla con el objetivo de ayudar a que el pueblo cubano se vaya abriendo y tenga una democracia más consolidada en el futuro". Es decir, para el líder socialista, existe democracia en Cuba, el atropello de las libertades fundamentales sólo es una situación "especial" y darle la manita a Raúl Castro y al resto de la nomenklatura, es ayudar al pueblo cubano. Bienvenido Míster Marshall, en versión Compay Segundo. ¿Cómo era su famoso Chan Chan?: "El cariño que te tengo / Yo no lo puedo negar / Se me sale la babita / Yo no lo puedo evitar". A partir de aquí, lo de siempre, guirigay con la derecha, retórica sobre las bondades de la bilateralidad con el régimen, pose de chulo pirulo porque-la-izquierda-siempre-tiene-motivos-inteligentes-para-perpetrar-despropósitos, y un jugueteo malvado con los conceptos de la libertad. Espectáculo deplorable que, en situación normal, generaría un debate de nivel, sino fuera porque la gran trituradora de la pelea interpartidos, convierte en desechos demagógicos las grandes ideas. Lo de Cuba, pues, ha quedado como una pelea de galifantes entre la derecha de siempre y su cara de perro, y la izquierda de siempre, bienintencionada, solidaria y cabal. En realidad, a todos les interesa más jugar con el drama cubano, en función de intereses económicos y políticos, que comprometerse seriamente con él.
La noticia en otros webs
Cuba es una dura realidad que reprime personas, destruye derechos, consagra élites corruptas, y envía al infierno las viejas utopías
Sin embargo, retóricas al margen, lo de Cuba no es entrañable. Lo de Cuba no es "especial". Lo de Cuba no es comprensible y, sobre todo, lo de Cuba no tiene nada que ver con la democracia. El hecho de que sea un régimen de izquierdas, nacido al albur de ideas transformadoras que, en su momento, querían cambiar la injusta realidad, no implica que años después, con sus cárceles, sus represaliados políticos, sus condenas a muerte, su corrupción estructural y su falta asfixiante de libertad, se haya convertido en el ejemplo más rastrero de una dictadura caduca, impermeable a los derechos fundamentales. Desde una perspectiva de radical compromiso con la Carta Internacional de Derechos Humanos -catecismo básico para poder ir honestamente por el mundo-, Cuba no se aguanta por ningún lado. Y si hacemos un alambicado circunloquio para intentar desviarnos de ese compromiso, y convertir a Cuba en nuestra excepción razonable, lo único que hacemos es traicionar esa Carta Internacional de Derechos Humanos. En este sentido, el viaje de Moratinos es exactamente lo que parece: un considerable e impresentable balón de oxígeno a favor de un régimen tiránico que genera represión, dolor y desespero. Que, además, Moratinos haya despreciado públicamente a la oposición cubana, oposición que vive en permanente estado de represión, es un gesto de un impudor político sorprendente. De ninguna manera se aguanta, ni el viaje, ni el desprecio a los opositores, ni los acuerdos con Cuba -que no serán fácilmente sancionados por Bruselas-, ni el simbolismo que todo ello representa. Peor aún, sólo se aguanta si entendemos la política exterior española como una improvisación permanente, sin otro escrúpulo que vender el producto, ni otro objetivo que militar en el manual del buen progre, versión adolescente Che Guevara. ¿En nombre de qué principios democráticos podemos condenar unas tiranías y mirar con ternura a otras?
El señor Villarrubia, ¿qué diccionario usa cuando busca adjetivos para una situación de represión política? Porque en mi diccionario no hay paliativos: Cuba es una dictadura. Y darle apoyo político, enviar altos mandatarios -cartita del Rey incluida-, cerrar acuerdos, despreciar a la oposición y, encima, convertir la represión del régimen en una pequeñez sin importancia, es una inmoralidad, a la par que una traición a los principios de la libertad.
Estamos siempre en lo mismo, la doble moral. La izquierda, menos estresada que la derecha en este tipo de cuestiones, se permite unos márgenes muy abusivos con los derechos fundamentales. Ya no se trata sólo de la amnesia que tiene respecto a sus propias miserias históricas, sino de la mirada bifocal que proyecta acerca de las miserias del presente. Por supuesto, hay unas izquierdas más ruidosas y reaccionarias que otras, y para muestra, la perla que me comentaban de la última asamblea del Bloque Nacionalista Galego (BNG), cuyo tipo más aplaudido fue un militante histórico que aseguró que, con todo el dolor de su alma, lo mejor que podía pasar es que Irán tuviera la bomba atómica y barriera a Israel del mapa. Diría que más que reaccionaria, hay una izquierda que se ha vuelto literalmente loca. Pero volviendo a los cauces de la racionalidad, no es de recibo que un Gobierno que patrimonializa el sentir progresista de una sociedad, arrastre ese patrimonio por los barrizales de las dictaduras amigas. Cuba no es un mito adolescente. Cuba es una dura realidad que reprime personas, destruye derechos, consagra élites corruptas, y envía las viejas utopías al infierno de las buenas intenciones. Cuba es una vergüenza. El viaje de Moratinos es su epílogo.
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Cuba es una dura realidad que reprime personas, destruye derechos, consagra élites corruptas, y envía al infierno las viejas utopías
Sin embargo, retóricas al margen, lo de Cuba no es entrañable. Lo de Cuba no es "especial". Lo de Cuba no es comprensible y, sobre todo, lo de Cuba no tiene nada que ver con la democracia. El hecho de que sea un régimen de izquierdas, nacido al albur de ideas transformadoras que, en su momento, querían cambiar la injusta realidad, no implica que años después, con sus cárceles, sus represaliados políticos, sus condenas a muerte, su corrupción estructural y su falta asfixiante de libertad, se haya convertido en el ejemplo más rastrero de una dictadura caduca, impermeable a los derechos fundamentales. Desde una perspectiva de radical compromiso con la Carta Internacional de Derechos Humanos -catecismo básico para poder ir honestamente por el mundo-, Cuba no se aguanta por ningún lado. Y si hacemos un alambicado circunloquio para intentar desviarnos de ese compromiso, y convertir a Cuba en nuestra excepción razonable, lo único que hacemos es traicionar esa Carta Internacional de Derechos Humanos. En este sentido, el viaje de Moratinos es exactamente lo que parece: un considerable e impresentable balón de oxígeno a favor de un régimen tiránico que genera represión, dolor y desespero. Que, además, Moratinos haya despreciado públicamente a la oposición cubana, oposición que vive en permanente estado de represión, es un gesto de un impudor político sorprendente. De ninguna manera se aguanta, ni el viaje, ni el desprecio a los opositores, ni los acuerdos con Cuba -que no serán fácilmente sancionados por Bruselas-, ni el simbolismo que todo ello representa. Peor aún, sólo se aguanta si entendemos la política exterior española como una improvisación permanente, sin otro escrúpulo que vender el producto, ni otro objetivo que militar en el manual del buen progre, versión adolescente Che Guevara. ¿En nombre de qué principios democráticos podemos condenar unas tiranías y mirar con ternura a otras?
El señor Villarrubia, ¿qué diccionario usa cuando busca adjetivos para una situación de represión política? Porque en mi diccionario no hay paliativos: Cuba es una dictadura. Y darle apoyo político, enviar altos mandatarios -cartita del Rey incluida-, cerrar acuerdos, despreciar a la oposición y, encima, convertir la represión del régimen en una pequeñez sin importancia, es una inmoralidad, a la par que una traición a los principios de la libertad.
Estamos siempre en lo mismo, la doble moral. La izquierda, menos estresada que la derecha en este tipo de cuestiones, se permite unos márgenes muy abusivos con los derechos fundamentales. Ya no se trata sólo de la amnesia que tiene respecto a sus propias miserias históricas, sino de la mirada bifocal que proyecta acerca de las miserias del presente. Por supuesto, hay unas izquierdas más ruidosas y reaccionarias que otras, y para muestra, la perla que me comentaban de la última asamblea del Bloque Nacionalista Galego (BNG), cuyo tipo más aplaudido fue un militante histórico que aseguró que, con todo el dolor de su alma, lo mejor que podía pasar es que Irán tuviera la bomba atómica y barriera a Israel del mapa. Diría que más que reaccionaria, hay una izquierda que se ha vuelto literalmente loca. Pero volviendo a los cauces de la racionalidad, no es de recibo que un Gobierno que patrimonializa el sentir progresista de una sociedad, arrastre ese patrimonio por los barrizales de las dictaduras amigas. Cuba no es un mito adolescente. Cuba es una dura realidad que reprime personas, destruye derechos, consagra élites corruptas, y envía las viejas utopías al infierno de las buenas intenciones. Cuba es una vergüenza. El viaje de Moratinos es su epílogo.
Entrevista a Norberto Fuentes, esbirro de Fidel
Internacional
ENTREVISTA: ENTREVISTA NORBERTO FUENTES ESCRITOR Y EX COLABORADOR DE CASTRO, EN EL EXILIO
"Las broncas entre Fidel y Raúl eran de coger palco para verlas"
JUAN JESÚS AZNÁREZ 08/04/2007
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Resultado 25 votos
Fidel Castro es una fuerza de la naturaleza que colocó a Cuba en la geopolítica mundial, fusiló y encarceló a pedido de la revolución, se desembarazó de Ernesto Guevara cuando sospechó que habría de traicionarle y no vacilaría en sacrificar a su hermano Raúl, a quien abroncó frecuentemente, si le sorprendiera en alguna deslealtad. No le importa quién vaya a sucederle. "Yo fui el único que creyó en la posibilidad del comunismo cubano", afirma el comandante en La autobiografía de Fidel Castro, de Norberto Fuentes, cuya segunda parte publicará Destino a mediados de este mes. Lejos de enaltecer o denigrar a Castro, el autor cubano lo interpreta a partir del triunfo de su revolución, en el año 1959. "Es la biografía que él no puede escribir sobre sí mismo, no puede llegar hasta donde llego yo, con sinceridad, y con la libertad que tengo para hacerlo. Lo conozco bien. Estuve con él, porque estuve en su revolución. Si alguien le cogió el pulso, fui yo", subraya el autor, residente en Miami, que dedicó buena parte de su vida a descifrar el pensamiento de Castro. La obra editada es voluminosa, 1.292 páginas, acorde con la magnitud del personaje, que reflexiona en primera persona sobre los acontecimientos que le tocó vivir. ¿Qué hay de ficción en el libro? "Sólo la voz de Fidel".
Raúl fusiló mucho
Desembarazarse del Che Guevara
El testamento del comandante
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webs en español
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El escritor afirma que los hechos narrados son ciertos y minuciosamente registrados
"El problema no está en lo que ha hecho, eso lo sabe todo el mundo, sino en el porqué, en el cómo"
"A Fidel le importa un carajo quién venga después (...). Está diciendo: 'Les dejo la papa caliente"
Norberto Fuentes (La Habana, 1943) perteneció al entorno de notables del régimen, y se le atribuye haber sido su comisionado en tareas políticas y de inteligencia, hasta que en el año 1989 es detenido durante las redadas de la denominada Causa 1, que culminaron con el juicio y fusilamiento de un grupo de jefes y oficiales del Ejército y del Ministerio del Interior, acusados de corrupción y narcotráfico, entre ellos su buen amigo el coronel Antonio de la Guardia.
El escritor pudo salir de Cuba en el año 1994 gracias, entre otros factores, a la mediación del premio Nobel colombiano y amigo de Castro Gabriel García Márquez. Antes llevó a cabo una huelga de hambre y fue balsero. Fuentes evade en su libro "los lugares comunes sobre la revolución y sobre Fidel: un dictador, un asesino con las manos manchadas de sangre... Por ahí no vamos a ningún lado. Se trata de entender un fenómeno, una fuerza de la naturaleza, que existe, que está ahí, que quedará permanentemente en la historia".
Pregunta. Puede ser que su autobiografía guste a Castro, ¿no?
Respuesta. Le debe gustar en cierto sentido. Digo, si aún conserva su sentido del humor. Y no es un libro que sea peyorativo. Es una interpretación de su carácter. Es un trabajo válido desde el punto de vista literario y de ensayo; sobre todo, del ensayo. Si coges la biografía que Edmund Morris escribió sobre Reagan (Dutch. A Memoir of Ronald Reagan, 1999), el autor introduce un personaje imaginario para poder explicar algunas cosas. Eso es mucho más falso que asumir la historia verdadera y contarla desde la perspectiva de Fidel Castro porque el problema está no en lo que ha hecho, que eso lo sabe todo el mundo, sino en el porqué, en el cómo, en lo que estaba en su cabecita. Y, sobre todo, en lo que se desprende de conversaciones íntimas. De lo que él me decía, de lo que le dijo a Raúl, de lo que le contó a Aldana [Carlos Aldana, secretario ideológico del Partido Comunista de Cuba (PCC) hasta su defenestración, en 1992], de lo que contaron otros, de lo que yo oí de éstos, y de su propia actuación.
P. ¿Le ha resultado difícil abordar su pensamiento, ponerse en su pellejo?
R. Bueno, yo no tengo su inteligencia. Es un hombre muy inteligente. Yo he tenido los resultados a la mano de lo que él ha hecho, pero nunca pude prever, ni tenía la posibilidad de ver las cosas que él vio. Y él ve mucho.
P. ¿No subyace en usted cierta admiración por el personaje que recrea?
R. Si hay admiración, es la admiración que él mismo se tiene. Y además con toda razón. Él puede tenerse toda la admiración que quiera.
P. Lo ha definido inteligente, pragmático y versátil.
R. Es un hombre fundamentalmente pragmático, una virtud de casi todas las revoluciones que han sobrevivido. Es ahí donde él se funde con la idea de la revolución, con el concepto universal de la revolución: todas las revoluciones van para adelante, para atrás, para la derecha, para la izquierda... Se adaptan al medio. No hay nada más darwiniano que una revolución. Y la cubana es leninista: una revolución vale lo que sepa defenderse.
P. El inventario de virtudes ya se ha dicho. ¿Y el de vicios?
R. Tiene muchos, pero él mismo le diría: ¿por qué mirar las manchas del sol? No vamos a valorar a Fidel Castro por sus vicios, sino por sus virtudes, por lo que ha sido su obra personal como gobernante. Yo diría también que el principal defecto es su educación gansteril, y por eso resuelve algunas cosas como las resuelve. No duda en fusilar a quien la revolución necesite fusilar.
P. ¿Fueron tan acusadas las disputas entre Fidel y Raúl?
R. Las broncas fueron de coger palco para verlas. La bronca ha sido siempre entre la ortodoxia de Raúl, un ideólogo, un comunista, y la pragmática audacia de Fidel, un luchador revolucionario con una obstinación por el poder. En los años ochenta, Raúl tenía grandes discusiones con Fidel sobre la perestroika (liberalización económica) y los problemas económicos de Cuba. Raúl era, y yo creo que lo sigue siendo, partidario de la perestroika y, de alguna manera, de la glásnost (transparencia). Las broncas corresponden a las luchas intestinas dentro de las fuerzas que mueven las revoluciones. Pero como la revolución cubana tiene tendencia a ocultarlas, ganan importancia cuando son reveladas.
P. Fidel Castro dice en su obra: "Entre mi deliberado propósito de enviarlo a la muerte..." (en el Congo o Bolivia). Dura acusación, ¿no?
R. Sí, lo mandó a matar. Pero Fidel realmente salvó al Che porque convirtió a un traidor en potencia en un santo de la iglesia revolucionaria.
P. ¿Es cierto que el Che temió ser asesinado en Cuba?
R. Sí. Todas estas escenas del libro son rigurosamente ciertas, minuciosamente registradas, y vienen casi siempre de alguno de los personajes que están ahí sentados. En el caso de los temores del Che, lo puedo decir ahora porque la información viene de alguien que murió: Víctor Pina, un viejo comunista.
P. ¿La URSS puenteó a Fidel Castro en la crisis de los misiles?
R. Le sorprendió la retirada de los misiles. Fidel siempre estaba exigiendo a Nikita Jruschov una declaración pública de que había un pacto militar entre Cuba y la URSS para evitar lo que pasó después. Pero Nikita lo que quería era monopolizar la crisis, que es lo que hizo y le quedó muy bien.
P. Castro escribe en su testamento que deja "la intrascendencia". No parece importarle qué vaya a pasar tras su muerte.
R. A Fidel le importa un carajo quién venga después. Apostar a lo que vayan a hacer las generaciones posteriores es una estupidez, es un problema de las generaciones futuras. Lo que está diciendo es: "Yo les dejo esta papa caliente, yo he pasado cincuenta años con ella en la mano y ni me he quemado; y ustedes están vivos por la enorme habilidad con que yo he sabido manejar este negocio. Somos hoy una potencia política, Cuba cuenta en todos los foros y nadie nos puede pasar por alto".
P. ¿Y qué pasará en Cuba tras su muerte?
R. Le voy a responder como Fidel Castro: es un problema de los que vengan. Cuando las revoluciones no son derrotadas, cuando no hay una restauración contrarrevolucionaria, pasa lo que pasó en China, en la URSS o en Vietnam después de la muerte de Ho Chi Minh (1890-1969). Que son etapas que se van dejando atrás. Todo se va normalizando. El único problema de Cuba hoy día es el problema económico, y eso se resuelve con dinero y con empresas mixtas y privadas.
Raúl fusiló mucho
"(...) Raúl. Mi hermano Raúl. No creo que vaya a fusilar a más nadie en lo que le queda de vida. Me refiero a que él mismo vaya a dar el tiro de gracia. Ya está muy viejo para esas historias. Así que no creo que se me presente una nueva oportunidad para hablarle del asunto y hasta quizá para recriminarle. Qué manito dura la de ese hermano mío en los territorios guerrilleros puestos bajo su mando. No creo que nadie haya fusilado tanto en Cuba como él. Y después del triunfo de la Revolución, en enero de 1959, estando al frente de la provincia de Oriente, empezó con el ametrallamiento de unos periodistas, en un descampado, en las afueras de la ciudad. Llegó un bulldozer, abrió una zanja, y otros en un ómnibus del servicio público, unos 70 en total, a los que apearon con un par de gritos, y ábreles fuego ahí mismo, con el mismo Raúl dando la orden y él mismo sacando la pistola y comenzando a abrir fuego a mansalva, de modo que sus 10 o 12 acompañantes reaccionaron con cierto retardo y cada cual disparó cuando estuvo listo, ora un revólver, ora una ametralladora, y luego empujando con los pies a los que habían quedado con alguna extremidad fuera de la zanja, para que cayeran dentro completos, y cuando el bulldozer regresara a tapar y dar pisón, no troceara los cadáveres y se quedaran pedazos fuera. El periódico donde Raúl había sacado a sus víctimas, más que batistiano, era masferrerista (...)".
Desembarazarse del Che Guevara
"(...) Para mí es fácil entender qué ocurre con los biógrafos del Che. Fallan en su apreciación -sobre todo, en lo que respecta a la expedición del Congo y a la tragedia de Bolivia- porque, entre mi deliberado propósito de enviarlo a la muerte y la eficacia de la CIA en cazarlo, prefieren apostar por las capacidades de la CIA; nuestros adversarios, por babosos; nuestros amigos, por denostarla. Vean ahora todo lo que puedo ofrecer como conocimiento -uno de inmaculado apego a la verdad- sobre el episodio.
Hice lo imposible durante meses por que la CIA se enterara de que el Che estaba en el Congo, mas nunca se dieron por aludidos. Era yo el que les transmitía las señales, y no Lawrence Devlin (espía de la CIA), ni un coño, y no hubo forma de que reaccionaran. Una tarde di un puñetazo contra mi buró mientras sostenía mis conciliábulos secretos con el comandante Piñeiro, y exclamé: '¡Cojones, gallego, pero qué gente más ineficiente ésta, chico! ¿Cuándo rayos se van a enterar de que les tengo servido al argentino, que está allí a su disposición?'. Piñeiro también había hecho lo imposible desde la DGI (Dirección General de Inteligencia). Sólo le faltó colocar un rastro de mendrugos de pan desde Langley hasta el Alto Zaire (Congo). Desde luego, no podíamos hacerlo a las claras. Entonces es cuando decido leer la famosa carta de despedida del Che. En principio tenía como objeto cerrarle el regreso a Cuba (...)".
El testamento del comandante
República de Cuba
Presidente del Consejo de Estado y del Gobierno
Compatriotas:
¿Qué les puedo dejar por fin? Creo recoger el sentido de todos ustedes cuando, en mi hora postrera, me decido, pues, a agasajarlos con el más preciado objeto de sus deseos durante tantos años de inconveniencias y de las obligaciones que ha implicado el tratarse de tú con la gloria. Sencillo: les dejo la intrascendencia. La más banal, la más vacía, la más desabrida.
Disfruten ahora en la molicie del olvido, sáltense el camino de la historia y el embrujo con que llevamos al mundo a las puertas del holocausto nuclear, con el que incendiamos un continente al sur de nosotros, pusimos de rodillas al imperio más poderoso desde los orígenes de la humanidad, apenas a 90 millas al norte de Cuba, y con el que llevamos a nuestras tropas por toda el África austral. Pero los entiendo. Ahora necesitan del disfrute de la paz, felicidad y prosperidad al que aludía Hegel cuando hablaba de los pueblos que son páginas en blanco de la historia. ¿No es eso lo que todos ustedes quieren? ¿No es eso a lo que aspiran? Pues muy pronto lo tendrán, porque voy a morir. Es por ello que se la dejo completa, la intrascendencia. Toda la intrascendencia.
Hasta la victoria siempre.
Fidel Castro Ruz
ENTREVISTA: ENTREVISTA NORBERTO FUENTES ESCRITOR Y EX COLABORADOR DE CASTRO, EN EL EXILIO
"Las broncas entre Fidel y Raúl eran de coger palco para verlas"
JUAN JESÚS AZNÁREZ 08/04/2007
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Fidel Castro es una fuerza de la naturaleza que colocó a Cuba en la geopolítica mundial, fusiló y encarceló a pedido de la revolución, se desembarazó de Ernesto Guevara cuando sospechó que habría de traicionarle y no vacilaría en sacrificar a su hermano Raúl, a quien abroncó frecuentemente, si le sorprendiera en alguna deslealtad. No le importa quién vaya a sucederle. "Yo fui el único que creyó en la posibilidad del comunismo cubano", afirma el comandante en La autobiografía de Fidel Castro, de Norberto Fuentes, cuya segunda parte publicará Destino a mediados de este mes. Lejos de enaltecer o denigrar a Castro, el autor cubano lo interpreta a partir del triunfo de su revolución, en el año 1959. "Es la biografía que él no puede escribir sobre sí mismo, no puede llegar hasta donde llego yo, con sinceridad, y con la libertad que tengo para hacerlo. Lo conozco bien. Estuve con él, porque estuve en su revolución. Si alguien le cogió el pulso, fui yo", subraya el autor, residente en Miami, que dedicó buena parte de su vida a descifrar el pensamiento de Castro. La obra editada es voluminosa, 1.292 páginas, acorde con la magnitud del personaje, que reflexiona en primera persona sobre los acontecimientos que le tocó vivir. ¿Qué hay de ficción en el libro? "Sólo la voz de Fidel".
Raúl fusiló mucho
Desembarazarse del Che Guevara
El testamento del comandante
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El escritor afirma que los hechos narrados son ciertos y minuciosamente registrados
"El problema no está en lo que ha hecho, eso lo sabe todo el mundo, sino en el porqué, en el cómo"
"A Fidel le importa un carajo quién venga después (...). Está diciendo: 'Les dejo la papa caliente"
Norberto Fuentes (La Habana, 1943) perteneció al entorno de notables del régimen, y se le atribuye haber sido su comisionado en tareas políticas y de inteligencia, hasta que en el año 1989 es detenido durante las redadas de la denominada Causa 1, que culminaron con el juicio y fusilamiento de un grupo de jefes y oficiales del Ejército y del Ministerio del Interior, acusados de corrupción y narcotráfico, entre ellos su buen amigo el coronel Antonio de la Guardia.
El escritor pudo salir de Cuba en el año 1994 gracias, entre otros factores, a la mediación del premio Nobel colombiano y amigo de Castro Gabriel García Márquez. Antes llevó a cabo una huelga de hambre y fue balsero. Fuentes evade en su libro "los lugares comunes sobre la revolución y sobre Fidel: un dictador, un asesino con las manos manchadas de sangre... Por ahí no vamos a ningún lado. Se trata de entender un fenómeno, una fuerza de la naturaleza, que existe, que está ahí, que quedará permanentemente en la historia".
Pregunta. Puede ser que su autobiografía guste a Castro, ¿no?
Respuesta. Le debe gustar en cierto sentido. Digo, si aún conserva su sentido del humor. Y no es un libro que sea peyorativo. Es una interpretación de su carácter. Es un trabajo válido desde el punto de vista literario y de ensayo; sobre todo, del ensayo. Si coges la biografía que Edmund Morris escribió sobre Reagan (Dutch. A Memoir of Ronald Reagan, 1999), el autor introduce un personaje imaginario para poder explicar algunas cosas. Eso es mucho más falso que asumir la historia verdadera y contarla desde la perspectiva de Fidel Castro porque el problema está no en lo que ha hecho, que eso lo sabe todo el mundo, sino en el porqué, en el cómo, en lo que estaba en su cabecita. Y, sobre todo, en lo que se desprende de conversaciones íntimas. De lo que él me decía, de lo que le dijo a Raúl, de lo que le contó a Aldana [Carlos Aldana, secretario ideológico del Partido Comunista de Cuba (PCC) hasta su defenestración, en 1992], de lo que contaron otros, de lo que yo oí de éstos, y de su propia actuación.
P. ¿Le ha resultado difícil abordar su pensamiento, ponerse en su pellejo?
R. Bueno, yo no tengo su inteligencia. Es un hombre muy inteligente. Yo he tenido los resultados a la mano de lo que él ha hecho, pero nunca pude prever, ni tenía la posibilidad de ver las cosas que él vio. Y él ve mucho.
P. ¿No subyace en usted cierta admiración por el personaje que recrea?
R. Si hay admiración, es la admiración que él mismo se tiene. Y además con toda razón. Él puede tenerse toda la admiración que quiera.
P. Lo ha definido inteligente, pragmático y versátil.
R. Es un hombre fundamentalmente pragmático, una virtud de casi todas las revoluciones que han sobrevivido. Es ahí donde él se funde con la idea de la revolución, con el concepto universal de la revolución: todas las revoluciones van para adelante, para atrás, para la derecha, para la izquierda... Se adaptan al medio. No hay nada más darwiniano que una revolución. Y la cubana es leninista: una revolución vale lo que sepa defenderse.
P. El inventario de virtudes ya se ha dicho. ¿Y el de vicios?
R. Tiene muchos, pero él mismo le diría: ¿por qué mirar las manchas del sol? No vamos a valorar a Fidel Castro por sus vicios, sino por sus virtudes, por lo que ha sido su obra personal como gobernante. Yo diría también que el principal defecto es su educación gansteril, y por eso resuelve algunas cosas como las resuelve. No duda en fusilar a quien la revolución necesite fusilar.
P. ¿Fueron tan acusadas las disputas entre Fidel y Raúl?
R. Las broncas fueron de coger palco para verlas. La bronca ha sido siempre entre la ortodoxia de Raúl, un ideólogo, un comunista, y la pragmática audacia de Fidel, un luchador revolucionario con una obstinación por el poder. En los años ochenta, Raúl tenía grandes discusiones con Fidel sobre la perestroika (liberalización económica) y los problemas económicos de Cuba. Raúl era, y yo creo que lo sigue siendo, partidario de la perestroika y, de alguna manera, de la glásnost (transparencia). Las broncas corresponden a las luchas intestinas dentro de las fuerzas que mueven las revoluciones. Pero como la revolución cubana tiene tendencia a ocultarlas, ganan importancia cuando son reveladas.
P. Fidel Castro dice en su obra: "Entre mi deliberado propósito de enviarlo a la muerte..." (en el Congo o Bolivia). Dura acusación, ¿no?
R. Sí, lo mandó a matar. Pero Fidel realmente salvó al Che porque convirtió a un traidor en potencia en un santo de la iglesia revolucionaria.
P. ¿Es cierto que el Che temió ser asesinado en Cuba?
R. Sí. Todas estas escenas del libro son rigurosamente ciertas, minuciosamente registradas, y vienen casi siempre de alguno de los personajes que están ahí sentados. En el caso de los temores del Che, lo puedo decir ahora porque la información viene de alguien que murió: Víctor Pina, un viejo comunista.
P. ¿La URSS puenteó a Fidel Castro en la crisis de los misiles?
R. Le sorprendió la retirada de los misiles. Fidel siempre estaba exigiendo a Nikita Jruschov una declaración pública de que había un pacto militar entre Cuba y la URSS para evitar lo que pasó después. Pero Nikita lo que quería era monopolizar la crisis, que es lo que hizo y le quedó muy bien.
P. Castro escribe en su testamento que deja "la intrascendencia". No parece importarle qué vaya a pasar tras su muerte.
R. A Fidel le importa un carajo quién venga después. Apostar a lo que vayan a hacer las generaciones posteriores es una estupidez, es un problema de las generaciones futuras. Lo que está diciendo es: "Yo les dejo esta papa caliente, yo he pasado cincuenta años con ella en la mano y ni me he quemado; y ustedes están vivos por la enorme habilidad con que yo he sabido manejar este negocio. Somos hoy una potencia política, Cuba cuenta en todos los foros y nadie nos puede pasar por alto".
P. ¿Y qué pasará en Cuba tras su muerte?
R. Le voy a responder como Fidel Castro: es un problema de los que vengan. Cuando las revoluciones no son derrotadas, cuando no hay una restauración contrarrevolucionaria, pasa lo que pasó en China, en la URSS o en Vietnam después de la muerte de Ho Chi Minh (1890-1969). Que son etapas que se van dejando atrás. Todo se va normalizando. El único problema de Cuba hoy día es el problema económico, y eso se resuelve con dinero y con empresas mixtas y privadas.
Raúl fusiló mucho
"(...) Raúl. Mi hermano Raúl. No creo que vaya a fusilar a más nadie en lo que le queda de vida. Me refiero a que él mismo vaya a dar el tiro de gracia. Ya está muy viejo para esas historias. Así que no creo que se me presente una nueva oportunidad para hablarle del asunto y hasta quizá para recriminarle. Qué manito dura la de ese hermano mío en los territorios guerrilleros puestos bajo su mando. No creo que nadie haya fusilado tanto en Cuba como él. Y después del triunfo de la Revolución, en enero de 1959, estando al frente de la provincia de Oriente, empezó con el ametrallamiento de unos periodistas, en un descampado, en las afueras de la ciudad. Llegó un bulldozer, abrió una zanja, y otros en un ómnibus del servicio público, unos 70 en total, a los que apearon con un par de gritos, y ábreles fuego ahí mismo, con el mismo Raúl dando la orden y él mismo sacando la pistola y comenzando a abrir fuego a mansalva, de modo que sus 10 o 12 acompañantes reaccionaron con cierto retardo y cada cual disparó cuando estuvo listo, ora un revólver, ora una ametralladora, y luego empujando con los pies a los que habían quedado con alguna extremidad fuera de la zanja, para que cayeran dentro completos, y cuando el bulldozer regresara a tapar y dar pisón, no troceara los cadáveres y se quedaran pedazos fuera. El periódico donde Raúl había sacado a sus víctimas, más que batistiano, era masferrerista (...)".
Desembarazarse del Che Guevara
"(...) Para mí es fácil entender qué ocurre con los biógrafos del Che. Fallan en su apreciación -sobre todo, en lo que respecta a la expedición del Congo y a la tragedia de Bolivia- porque, entre mi deliberado propósito de enviarlo a la muerte y la eficacia de la CIA en cazarlo, prefieren apostar por las capacidades de la CIA; nuestros adversarios, por babosos; nuestros amigos, por denostarla. Vean ahora todo lo que puedo ofrecer como conocimiento -uno de inmaculado apego a la verdad- sobre el episodio.
Hice lo imposible durante meses por que la CIA se enterara de que el Che estaba en el Congo, mas nunca se dieron por aludidos. Era yo el que les transmitía las señales, y no Lawrence Devlin (espía de la CIA), ni un coño, y no hubo forma de que reaccionaran. Una tarde di un puñetazo contra mi buró mientras sostenía mis conciliábulos secretos con el comandante Piñeiro, y exclamé: '¡Cojones, gallego, pero qué gente más ineficiente ésta, chico! ¿Cuándo rayos se van a enterar de que les tengo servido al argentino, que está allí a su disposición?'. Piñeiro también había hecho lo imposible desde la DGI (Dirección General de Inteligencia). Sólo le faltó colocar un rastro de mendrugos de pan desde Langley hasta el Alto Zaire (Congo). Desde luego, no podíamos hacerlo a las claras. Entonces es cuando decido leer la famosa carta de despedida del Che. En principio tenía como objeto cerrarle el regreso a Cuba (...)".
El testamento del comandante
República de Cuba
Presidente del Consejo de Estado y del Gobierno
Compatriotas:
¿Qué les puedo dejar por fin? Creo recoger el sentido de todos ustedes cuando, en mi hora postrera, me decido, pues, a agasajarlos con el más preciado objeto de sus deseos durante tantos años de inconveniencias y de las obligaciones que ha implicado el tratarse de tú con la gloria. Sencillo: les dejo la intrascendencia. La más banal, la más vacía, la más desabrida.
Disfruten ahora en la molicie del olvido, sáltense el camino de la historia y el embrujo con que llevamos al mundo a las puertas del holocausto nuclear, con el que incendiamos un continente al sur de nosotros, pusimos de rodillas al imperio más poderoso desde los orígenes de la humanidad, apenas a 90 millas al norte de Cuba, y con el que llevamos a nuestras tropas por toda el África austral. Pero los entiendo. Ahora necesitan del disfrute de la paz, felicidad y prosperidad al que aludía Hegel cuando hablaba de los pueblos que son páginas en blanco de la historia. ¿No es eso lo que todos ustedes quieren? ¿No es eso a lo que aspiran? Pues muy pronto lo tendrán, porque voy a morir. Es por ello que se la dejo completa, la intrascendencia. Toda la intrascendencia.
Hasta la victoria siempre.
Fidel Castro Ruz
Respuesta de Marta Beatriz Roque al viaje de Moratinos
http://www.analitica.com/mujeranalitica/lasmujeresopinan/1979221.asp
Cuba, la Tragedia interminable Martha Beatriz Roque Cabello - Gentiuno - VenezuelaSábado, 7 de abril de 2007
Lo que hay oculto en la complacencia del gobierno español con el régimen totalitario cubano, sólo ellos lo saben. Las fuerzas democráticas del mundo deben ser movilizadas. Los principios no se negocian.
Si el ministro de exteriores de España, Miguel Ángel Moratinos aceptó la condición de no entrevistarse con la oposición interna, que -usualmente- le es impuesta a los visitantes extranjeros de alto rango, para ser atendidos por los funcionarios del régimen, entonces son falsas las palabras que pronunció antes de salir del país …"Tenemos interlocución con todos los sectores de la sociedad cubana,… los que se quieran entrevistar con nosotros y verse, se ven, porque nuestro compromiso en materia de derechos humanos siempre ha sido inalterable y seguirá inalterable".
Los graves problemas por los que atraviesa el pueblo cubano, no necesitan de mecanismos, ni de acuerdos, están ávidos de acciones. Si en los próximos días son liberados algunos presos políticos ¡bienvenido sea!, pero no se pueden cambiar principios por presos; ni ellos, ni sus familiares estarían de acuerdo.
Si el tema de los presos no será tratado dentro de la agenda del llamado "diálogo político": ¿de qué derechos humanos están hablando? O habría que cuestionar si el tan gastado argumento que los disidentes son mercenarios a sueldo de los Estados Unidos y terroristas, es admitido por el gobierno español, como aceptaron en el Comunicado Conjunto –al cierre de las conversaciones- referirse a los comunicados especiales sobre leyes y medidas de carácter extraterritoriales acordados en las Cumbres Iberoamericanas de Salamanca y Montevideo y olvidaron que en la Cumbre de Viña del Mar (Chile) se apostó por el pluripartidismo, lo que no ha cumplido Cuba nunca.
¿De qué se discutirá en el mes de mayo en la Comisión que crearon al efecto? El propio Felipe Pérez Roque declaró que: "Cuba no permite que se le venga a imponer o a aconsejar sin haber pedido el consejo" y además enfatizó: …"el acuerdo no está encaminado al examen de la situación interna de ninguno de los dos países"… "… es un mecanismo permanente y formal de diálogo político que no excluye el tema de la cooperación internacional para la promoción de los derechos humanos".
Si el señor Moratinos considera que su estancia en Cuba fue "intensa y fructífera" porque le permitió "conocer de primera mano la realidad cubana", está despreciando totalmente al pueblo de Cuba, ya que lugares como: los museos, el Centro Histórico de La Habana y la Escuela Latinoamérica de Medicina, no muestran en lo absoluto la falta de derechos sociales, civiles y económicos que padecen los cubanos y por los que luchan -de manera pacífica- los disidentes dentro de la isla.
Estos mismos disidentes han dado una prueba de madurez política, de unidad en el tema de los presos y los derechos humanos, cuando la mayoría de las organizaciones rechazó asistir a una ronda de consuelo, en la Embajada de España -con el Director General para Iberoamérica- después que Moratinos abandonó el país. Pero hay que recordar que entre ellos hay dos premios Sajarov de Derechos Humanos del Parlamento Europeo.
Sería apreciable que organizaciones internacionales preocupadas por la situación de los presos políticos en Cuba, como Amnistía Internacional, Reportero sin Fronteras, People in Need y otras, se pronunciaran al respecto. Pero de forma general los demócratas del mundo deben repudiar esta indigna actuación del gobierno español. Hay muchas formas de hacerlo, lo importante es que sientan fuertemente la repulsa internacional.
Las fuerzas democráticas del mundo pueden dar una lección por esta traición de España y permanecer muy alertas para que no la traslade al seno de la Unión Europea, tal y como adelantó Moratinos. Si como dijo Pérez Roque "España se ha apartado de un camino de imposiciones de condicionamientos políticos a Cuba… y esto marca los primeros jalones de un camino que puede abrir el diálogo con la Unión Europea", hay que evitar que el régimen cubano exporte a Europa su totalitarismo.
Si España se sintió equivocada y "rectificó definitivamente" sus relaciones con Cuba, como afirmó Carlos Lage; el resto de Europa no puede caer en este supuesto "complejo de culpa". Entre los adelantos para el restablecimiento de relaciones con la Unión Europea, está la afirmación de que: "para esto (la Unión Europea) tendría que eliminar "definitivamente" las sanciones contra Cuba".
El que la visita haya terminado, no significa que el tema esté agotado, recién comienza el tutelaje español y es necesario ponerle fin. No es posible permitir que se le suavice el rostro a la dictadura o que se le fortalezca su –deteriorada- imagen en un mundo de libertades y democracia.
Atención a las fuerzas democráticas internacionales: ¡¡¡ustedes tienen la palabra y la acción!!!
Ciudad de La Habana, 5 de marzo del 2007, Martha Beatriz Roque Cabello, Presa política del grupo de los 75 en Licencia Extrapenal
Cuba, la Tragedia interminable Martha Beatriz Roque Cabello - Gentiuno - VenezuelaSábado, 7 de abril de 2007
Lo que hay oculto en la complacencia del gobierno español con el régimen totalitario cubano, sólo ellos lo saben. Las fuerzas democráticas del mundo deben ser movilizadas. Los principios no se negocian.
Si el ministro de exteriores de España, Miguel Ángel Moratinos aceptó la condición de no entrevistarse con la oposición interna, que -usualmente- le es impuesta a los visitantes extranjeros de alto rango, para ser atendidos por los funcionarios del régimen, entonces son falsas las palabras que pronunció antes de salir del país …"Tenemos interlocución con todos los sectores de la sociedad cubana,… los que se quieran entrevistar con nosotros y verse, se ven, porque nuestro compromiso en materia de derechos humanos siempre ha sido inalterable y seguirá inalterable".
Los graves problemas por los que atraviesa el pueblo cubano, no necesitan de mecanismos, ni de acuerdos, están ávidos de acciones. Si en los próximos días son liberados algunos presos políticos ¡bienvenido sea!, pero no se pueden cambiar principios por presos; ni ellos, ni sus familiares estarían de acuerdo.
Si el tema de los presos no será tratado dentro de la agenda del llamado "diálogo político": ¿de qué derechos humanos están hablando? O habría que cuestionar si el tan gastado argumento que los disidentes son mercenarios a sueldo de los Estados Unidos y terroristas, es admitido por el gobierno español, como aceptaron en el Comunicado Conjunto –al cierre de las conversaciones- referirse a los comunicados especiales sobre leyes y medidas de carácter extraterritoriales acordados en las Cumbres Iberoamericanas de Salamanca y Montevideo y olvidaron que en la Cumbre de Viña del Mar (Chile) se apostó por el pluripartidismo, lo que no ha cumplido Cuba nunca.
¿De qué se discutirá en el mes de mayo en la Comisión que crearon al efecto? El propio Felipe Pérez Roque declaró que: "Cuba no permite que se le venga a imponer o a aconsejar sin haber pedido el consejo" y además enfatizó: …"el acuerdo no está encaminado al examen de la situación interna de ninguno de los dos países"… "… es un mecanismo permanente y formal de diálogo político que no excluye el tema de la cooperación internacional para la promoción de los derechos humanos".
Si el señor Moratinos considera que su estancia en Cuba fue "intensa y fructífera" porque le permitió "conocer de primera mano la realidad cubana", está despreciando totalmente al pueblo de Cuba, ya que lugares como: los museos, el Centro Histórico de La Habana y la Escuela Latinoamérica de Medicina, no muestran en lo absoluto la falta de derechos sociales, civiles y económicos que padecen los cubanos y por los que luchan -de manera pacífica- los disidentes dentro de la isla.
Estos mismos disidentes han dado una prueba de madurez política, de unidad en el tema de los presos y los derechos humanos, cuando la mayoría de las organizaciones rechazó asistir a una ronda de consuelo, en la Embajada de España -con el Director General para Iberoamérica- después que Moratinos abandonó el país. Pero hay que recordar que entre ellos hay dos premios Sajarov de Derechos Humanos del Parlamento Europeo.
Sería apreciable que organizaciones internacionales preocupadas por la situación de los presos políticos en Cuba, como Amnistía Internacional, Reportero sin Fronteras, People in Need y otras, se pronunciaran al respecto. Pero de forma general los demócratas del mundo deben repudiar esta indigna actuación del gobierno español. Hay muchas formas de hacerlo, lo importante es que sientan fuertemente la repulsa internacional.
Las fuerzas democráticas del mundo pueden dar una lección por esta traición de España y permanecer muy alertas para que no la traslade al seno de la Unión Europea, tal y como adelantó Moratinos. Si como dijo Pérez Roque "España se ha apartado de un camino de imposiciones de condicionamientos políticos a Cuba… y esto marca los primeros jalones de un camino que puede abrir el diálogo con la Unión Europea", hay que evitar que el régimen cubano exporte a Europa su totalitarismo.
Si España se sintió equivocada y "rectificó definitivamente" sus relaciones con Cuba, como afirmó Carlos Lage; el resto de Europa no puede caer en este supuesto "complejo de culpa". Entre los adelantos para el restablecimiento de relaciones con la Unión Europea, está la afirmación de que: "para esto (la Unión Europea) tendría que eliminar "definitivamente" las sanciones contra Cuba".
El que la visita haya terminado, no significa que el tema esté agotado, recién comienza el tutelaje español y es necesario ponerle fin. No es posible permitir que se le suavice el rostro a la dictadura o que se le fortalezca su –deteriorada- imagen en un mundo de libertades y democracia.
Atención a las fuerzas democráticas internacionales: ¡¡¡ustedes tienen la palabra y la acción!!!
Ciudad de La Habana, 5 de marzo del 2007, Martha Beatriz Roque Cabello, Presa política del grupo de los 75 en Licencia Extrapenal
Sunday, April 8, 2007
Zapatero en espera de que Castro libere algunos presos para justificar su fiasco
http://www.elpais.com/articulo/espana/oposicion/cubana/carga/propuesta/espanola/dialogo/derechos/humanos/elpepunac/20070408elpepinac_8/Tes
La oposición cubana carga contra la propuesta española de diálogo sobre derechos humanos
Escepticismo y cautela de los diplomáticos europeos, en espera de la respuesta de La Habana
MAURICIO VICENT - La Habana - 08/04/2007
Vota
Resultado 24 votos
El reciente viaje a Cuba del ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, sigue provocando polémica. La resaca política de la visita afecta especialmente a la disidencia, en su mayoría crítica con el Gobierno español, y a las embajadas de los demás Estados europeos, que tratan de analizar ahora el alcance real de la estrategia de acercamiento promovida por la diplomacia española. Entre los diplomáticos europeos predomina el escepticismo, pero también la cautela en espera de los siguientes pasos de las autoridades cubanas.
El termómetro de la excarcelación de presos
La noticia en otros webs
webs en español
en otros idiomas
Blogs que enlazan aquí
La mayoría de los grupos de la disidencia han criticado con dureza al ministro español, y no sólo por marcharse sin recibirlos y encargar al director general para Iberoamérica, Javier Sandomingo, reunirse con ellos un día después de su partida. Cuestionan sobre todo la conveniencia de la visita y todavía más la utilidad de la creación de un mecanismo institucional para dialogar con las autoridades sobre derechos humanos, el resultado más visible del viaje.
Las Damas de Blanco, el colectivo de mujeres familiares de los 75 disidentes con largas condenas desde la primavera de 2003, fue el primero en poner el grito en el cielo. Miriam Leyva, esposa de Oscar Espinosa Chepe -uno de los 16 miembros del Grupo de los 75 liberado con una "licencia extrapenal" por motivos de salud- fue especialmente directa en los días de la visita: "Moratinos traicionó a nuestros prisioneros y a todas las personas reprimidas desde marzo de 2003", dijo. Considero que nos debe una excusa por esta humillación y estos acuerdos con un Gobierno que desconoce absolutamente los derechos humanos".
En esta misma línea se manifestó la economista Martha Beatriz Roque, líder de la Asamblea para Promover la Sociedad Civil, quien calificó el viaje de "muy negativo" y "un retroceso". "Moratinos fue totalmente complaciente con el Gobierno y aceptó todas sus condiciones. ¿De qué diálogo de derechos humanos están hablando si delante de él Felipe Pérez Roque dijo que los presos eran mercenarios y terroristas y que estaban fuera de la agenda?".
Martha Beatriz Roque se refería al incidente ocurrido el martes durante la rueda de prensa de ambos ministros tras presentar el acuerdo alcanzado en materia de diálogo sobre derechos humanos. Al preguntarle un periodista si habían hablado de los presos políticos, el canciller dio la habitual respuesta cubana: en la isla no existen prisioneros de conciencia. Todos los que están en la cárcel son "mercenarios al servicio de una potencia extranjera" y este es un "asunto interno" que está "fuera de la agenda". Moratinos, visiblemente contrariado pero tratando de que la cosa no llegara a mayores, dijo escuetamente justo después: "Hemos discutido todos los temas en un clima de confianza, de entendimiento y de respeto".
"Experto en engañar"
El activista de los derechos humanos Elizardo Sánchez es también escéptico sobre el posible resultado del dialogo: "No creemos que el Gobierno de Cuba vaya a responder de manera positiva al esfuerzo diplomático español. El Gobierno de Cuba es experto en engañar a casi todo el mundo".
Para el líder del Proyecto Varela, Oswaldo Payá, es especialmente insultante que el Gobierno español se haya "adaptado a las condiciones de exclusión que el régimen impone a la disidencia". Y Vladimiro Roca, del Movimiento Todos Unidos considera que la visita sólo fue positiva para Cuba, pues supone "un espaldarazo en este momento de crisis. El viaje se venía preparando desde hace tiempo y no ha logrado siquiera la excarcelación de un preso político".
Laura Poyán, otra de las líderes de las Damas de Blanco, condiciona su valoración de la visita a los resultados. "Si dentro de unos días o semanas el Gobierno libera a 10 presos, acerca a sus hogares a los 27 que cumplen condena fuera de sus provincias y les da un trato mejor en la cárcel, entonces puede considerarse que habrá sido fructífera, pero sino es así, es lamentable".
Todos fueron invitados al encuentro con Sandomingo pero declinaron participar. Sí lo hicieron los socialdemócratas Manuel Cuesta Morúa y Eloy Gutiérrez Menoyo, para quienes la visita fue positiva. Según Cuesta Morúa, "no se debe sustituir la eficacia posible de un dialogo entre Gobierno y Gobierno en materia de derechos humanos por 15 minutos de fama con Moratinos". A juicio de este opositor, el acuerdo de dialogo tiene valor, pues aunque Cuba trate de introducir su visión excluyente, "se trata de un primer paso importante, ya que el Gobierno acepta discutir sobre un tema tabú".
Menoyo, ex comandante que pasó 22 años en la cárcel y fue liberado gracias a gestiones de Felipe González, va más allá: "Lo logrado es muy importante, pues por ahí se empieza. Lo de menos es que Pérez Roque dijera el otro día que los presos están fuera de la agenda. Los diálogos pueden comenzar así, con exabruptos, pero luego ambas partes se sientan en la mesa, alejadas de los micrófonos, expresan sus diferencias".
El termómetro de la excarcelación de presos
Los diplomáticos europeos acreditados en La Habana han seguido con gran interés el viaje de Moratinos. El criterio general es que España ha hecho una apuesta fuerte, arriesgada y con valor, y ahora se trata de comprobar si Cuba corresponde a este esfuerzo diplomático. El viernes pasado, el embajador español, Carlos Alonso Zaldivar, se reunió con sus colegas europeos para explicar cómo fue la visita, el contenido de los acuerdos y su posible alcance en beneficio de todos los miembros de la UE.
"España se ha tirado de cabeza a la piscina, ha dado cosas tangibles a cambio de intangibles y promesas de futuro; por eso es importante saber hasta dónde Cuba esta dispuesta a llegar en su ayuda a la posición española", asegura uno de los diplomáticos europeos que estuvo presente en la reunión. La ayuda que todo el mundo espera tiene un termómetro que es la excarcelación de presos. Otra podría ser que las autoridades rebajen el tono beligerante contra la UE y que cesen los actos de repudio. Si hubiera una respuesta favorable de Cuba, algunos considerarían que La Habana esta dispuesta a avanzar y que la vía abierta por España compensa.
Escepticismo hay. Algunos embajadores recuerdan que, en el pasado, países como Canadá tuvieron mecanismos similares de dialogo sobre derechos humanos y fracasaron. En la reunión del viernes, uno de los embajadores preguntó a Zaldívar sí iba a dialogar como "interlocutor privilegiado" de las autoridades o como representante de España. Era una broma, pero no tanto, pues son conocidas las reticencias de muchos a la estrategia de acercamiento de España. Más cuando el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, dijo durante la visita que su país no está dispuesto a iniciar aún un diálogo con la UE. El mejor resumen: hay que esperar.
La oposición cubana carga contra la propuesta española de diálogo sobre derechos humanos
Escepticismo y cautela de los diplomáticos europeos, en espera de la respuesta de La Habana
MAURICIO VICENT - La Habana - 08/04/2007
Vota
Resultado 24 votos
El reciente viaje a Cuba del ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, sigue provocando polémica. La resaca política de la visita afecta especialmente a la disidencia, en su mayoría crítica con el Gobierno español, y a las embajadas de los demás Estados europeos, que tratan de analizar ahora el alcance real de la estrategia de acercamiento promovida por la diplomacia española. Entre los diplomáticos europeos predomina el escepticismo, pero también la cautela en espera de los siguientes pasos de las autoridades cubanas.
El termómetro de la excarcelación de presos
La noticia en otros webs
webs en español
en otros idiomas
Blogs que enlazan aquí
La mayoría de los grupos de la disidencia han criticado con dureza al ministro español, y no sólo por marcharse sin recibirlos y encargar al director general para Iberoamérica, Javier Sandomingo, reunirse con ellos un día después de su partida. Cuestionan sobre todo la conveniencia de la visita y todavía más la utilidad de la creación de un mecanismo institucional para dialogar con las autoridades sobre derechos humanos, el resultado más visible del viaje.
Las Damas de Blanco, el colectivo de mujeres familiares de los 75 disidentes con largas condenas desde la primavera de 2003, fue el primero en poner el grito en el cielo. Miriam Leyva, esposa de Oscar Espinosa Chepe -uno de los 16 miembros del Grupo de los 75 liberado con una "licencia extrapenal" por motivos de salud- fue especialmente directa en los días de la visita: "Moratinos traicionó a nuestros prisioneros y a todas las personas reprimidas desde marzo de 2003", dijo. Considero que nos debe una excusa por esta humillación y estos acuerdos con un Gobierno que desconoce absolutamente los derechos humanos".
En esta misma línea se manifestó la economista Martha Beatriz Roque, líder de la Asamblea para Promover la Sociedad Civil, quien calificó el viaje de "muy negativo" y "un retroceso". "Moratinos fue totalmente complaciente con el Gobierno y aceptó todas sus condiciones. ¿De qué diálogo de derechos humanos están hablando si delante de él Felipe Pérez Roque dijo que los presos eran mercenarios y terroristas y que estaban fuera de la agenda?".
Martha Beatriz Roque se refería al incidente ocurrido el martes durante la rueda de prensa de ambos ministros tras presentar el acuerdo alcanzado en materia de diálogo sobre derechos humanos. Al preguntarle un periodista si habían hablado de los presos políticos, el canciller dio la habitual respuesta cubana: en la isla no existen prisioneros de conciencia. Todos los que están en la cárcel son "mercenarios al servicio de una potencia extranjera" y este es un "asunto interno" que está "fuera de la agenda". Moratinos, visiblemente contrariado pero tratando de que la cosa no llegara a mayores, dijo escuetamente justo después: "Hemos discutido todos los temas en un clima de confianza, de entendimiento y de respeto".
"Experto en engañar"
El activista de los derechos humanos Elizardo Sánchez es también escéptico sobre el posible resultado del dialogo: "No creemos que el Gobierno de Cuba vaya a responder de manera positiva al esfuerzo diplomático español. El Gobierno de Cuba es experto en engañar a casi todo el mundo".
Para el líder del Proyecto Varela, Oswaldo Payá, es especialmente insultante que el Gobierno español se haya "adaptado a las condiciones de exclusión que el régimen impone a la disidencia". Y Vladimiro Roca, del Movimiento Todos Unidos considera que la visita sólo fue positiva para Cuba, pues supone "un espaldarazo en este momento de crisis. El viaje se venía preparando desde hace tiempo y no ha logrado siquiera la excarcelación de un preso político".
Laura Poyán, otra de las líderes de las Damas de Blanco, condiciona su valoración de la visita a los resultados. "Si dentro de unos días o semanas el Gobierno libera a 10 presos, acerca a sus hogares a los 27 que cumplen condena fuera de sus provincias y les da un trato mejor en la cárcel, entonces puede considerarse que habrá sido fructífera, pero sino es así, es lamentable".
Todos fueron invitados al encuentro con Sandomingo pero declinaron participar. Sí lo hicieron los socialdemócratas Manuel Cuesta Morúa y Eloy Gutiérrez Menoyo, para quienes la visita fue positiva. Según Cuesta Morúa, "no se debe sustituir la eficacia posible de un dialogo entre Gobierno y Gobierno en materia de derechos humanos por 15 minutos de fama con Moratinos". A juicio de este opositor, el acuerdo de dialogo tiene valor, pues aunque Cuba trate de introducir su visión excluyente, "se trata de un primer paso importante, ya que el Gobierno acepta discutir sobre un tema tabú".
Menoyo, ex comandante que pasó 22 años en la cárcel y fue liberado gracias a gestiones de Felipe González, va más allá: "Lo logrado es muy importante, pues por ahí se empieza. Lo de menos es que Pérez Roque dijera el otro día que los presos están fuera de la agenda. Los diálogos pueden comenzar así, con exabruptos, pero luego ambas partes se sientan en la mesa, alejadas de los micrófonos, expresan sus diferencias".
El termómetro de la excarcelación de presos
Los diplomáticos europeos acreditados en La Habana han seguido con gran interés el viaje de Moratinos. El criterio general es que España ha hecho una apuesta fuerte, arriesgada y con valor, y ahora se trata de comprobar si Cuba corresponde a este esfuerzo diplomático. El viernes pasado, el embajador español, Carlos Alonso Zaldivar, se reunió con sus colegas europeos para explicar cómo fue la visita, el contenido de los acuerdos y su posible alcance en beneficio de todos los miembros de la UE.
"España se ha tirado de cabeza a la piscina, ha dado cosas tangibles a cambio de intangibles y promesas de futuro; por eso es importante saber hasta dónde Cuba esta dispuesta a llegar en su ayuda a la posición española", asegura uno de los diplomáticos europeos que estuvo presente en la reunión. La ayuda que todo el mundo espera tiene un termómetro que es la excarcelación de presos. Otra podría ser que las autoridades rebajen el tono beligerante contra la UE y que cesen los actos de repudio. Si hubiera una respuesta favorable de Cuba, algunos considerarían que La Habana esta dispuesta a avanzar y que la vía abierta por España compensa.
Escepticismo hay. Algunos embajadores recuerdan que, en el pasado, países como Canadá tuvieron mecanismos similares de dialogo sobre derechos humanos y fracasaron. En la reunión del viernes, uno de los embajadores preguntó a Zaldívar sí iba a dialogar como "interlocutor privilegiado" de las autoridades o como representante de España. Era una broma, pero no tanto, pues son conocidas las reticencias de muchos a la estrategia de acercamiento de España. Más cuando el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, dijo durante la visita que su país no está dispuesto a iniciar aún un diálogo con la UE. El mejor resumen: hay que esperar.
La Union Europea en contra de la relacion con Cuba
España
La UE, en contra de la relación con Cuba
http://www.larazon.es/noticias/noti_nac36854.htm
Alemania ostenta la presidencia de turno de la Unión Europea y no parece que sea partidaria de la reanudación de las relaciones entre Cuba y la vieja Europa. De hecho, el Embajador de ese país en la isla caribeña, a diferencia del director general español para Iberoamérica, sí consiguió la asistencia a su cita de toda la disidencia cubana, agradecida con el gesto del diplomático germano. Los opositores al régimen castrista se sintieron realmente defraudados ante la actitud del ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, que fue a La Habana con una agenda cerrada y pactada en la que no cabía el encuentro con los anticastristas, como así ocurrió. También protestaron por el diseño del viaje muchas organizaciones no gubernamentales que luchan por conseguir el respeto a los derechos humanos y la puesta en libertad de los intelectuales encarcelados.
La UE, en contra de la relación con Cuba
http://www.larazon.es/noticias/noti_nac36854.htm
Alemania ostenta la presidencia de turno de la Unión Europea y no parece que sea partidaria de la reanudación de las relaciones entre Cuba y la vieja Europa. De hecho, el Embajador de ese país en la isla caribeña, a diferencia del director general español para Iberoamérica, sí consiguió la asistencia a su cita de toda la disidencia cubana, agradecida con el gesto del diplomático germano. Los opositores al régimen castrista se sintieron realmente defraudados ante la actitud del ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, que fue a La Habana con una agenda cerrada y pactada en la que no cabía el encuentro con los anticastristas, como así ocurrió. También protestaron por el diseño del viaje muchas organizaciones no gubernamentales que luchan por conseguir el respeto a los derechos humanos y la puesta en libertad de los intelectuales encarcelados.
La Union Europea en contra de la relacion con Cuba
España
La UE, en contra de la relación con Cuba
http://www.larazon.es/noticias/noti_nac36854.htm
Alemania ostenta la presidencia de turno de la Unión Europea y no parece que sea partidaria de la reanudación de las relaciones entre Cuba y la vieja Europa. De hecho, el Embajador de ese país en la isla caribeña, a diferencia del director general español para Iberoamérica, sí consiguió la asistencia a su cita de toda la disidencia cubana, agradecida con el gesto del diplomático germano. Los opositores al régimen castrista se sintieron realmente defraudados ante la actitud del ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, que fue a La Habana con una agenda cerrada y pactada en la que no cabía el encuentro con los anticastristas, como así ocurrió. También protestaron por el diseño del viaje muchas organizaciones no gubernamentales que luchan por conseguir el respeto a los derechos humanos y la puesta en libertad de los intelectuales encarcelados.
La UE, en contra de la relación con Cuba
http://www.larazon.es/noticias/noti_nac36854.htm
Alemania ostenta la presidencia de turno de la Unión Europea y no parece que sea partidaria de la reanudación de las relaciones entre Cuba y la vieja Europa. De hecho, el Embajador de ese país en la isla caribeña, a diferencia del director general español para Iberoamérica, sí consiguió la asistencia a su cita de toda la disidencia cubana, agradecida con el gesto del diplomático germano. Los opositores al régimen castrista se sintieron realmente defraudados ante la actitud del ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, que fue a La Habana con una agenda cerrada y pactada en la que no cabía el encuentro con los anticastristas, como así ocurrió. También protestaron por el diseño del viaje muchas organizaciones no gubernamentales que luchan por conseguir el respeto a los derechos humanos y la puesta en libertad de los intelectuales encarcelados.
Friday, April 6, 2007
El New York Times vuelve a coincidir con el despota Castro
http://www.invasor.cu/sistema/paginas/default.asp?id=05-04-2007_Destaca%20The%20New%20York%20Times%20reflexiones%20de%20Fidel
Destaca The New York Times reflexiones de Fidel
(Actualizado 5 de abril del 2007, 4:00 pm)
El influyente diario The New York Times destacó este jueves entre sus principales informaciones la crítica formulada por el presidente de Cuba, Fidel Castro, a los planes de Bush de incrementar el uso de alimentos como el maíz y la soya para la producción de etanol.
También enjuició el aumento sin precedentes del cultivo de maíz en Estados Unidos para producir etanol y apenas sustituir una pequeña fracción del petróleo que consume el país.
En un editorial titulado Las consecuencias del maíz, el rotativo comenta el desmedido interés de los granjeros por incrementar las tierras dedicadas a la gramínea, en su afán de obtener ganancias rápidas.El súbito vuelco hacia la producción de ese cereal se deriva de la política del presidente George W. Bush a favor de los biocombustibles, aun a riesgo de romper el balance agrícola de la nación, con una súbita baja de las áreas de soya o algodón, entre otras.The New York Times revela que este año los agricultores norteamericanos sembrarán de maíz 90,5 millones de acres (36,6 millones de hectáreas), es decir, 12 millones de acres (4,8 millones de hectáreas) más que el año pasado, la mayor área destinada a ese cultivo desde 1944.Las tierras destinadas a la soya disminuirán en más del 10 por ciento y lo mismo ocurrirá con el trigo y el algodón, agrega el diario.Además del peligro que esto entraña en relación con la producción de cereales para la exportación, el periódico apunta otros riesgos menos conocidos: la puesta en explotación de tierras que se encuentran sujetas a un programa de protección del medio ambiente.Se trata de unos 15 millones de hectáreas que fueron reintegradas a la naturaleza por ser muy montañosas, húmedas, o reservas de flora y fauna, que son conservadas por fondos aportados por los contribuyentes.El Programa de Conservación de Reservas ya paralizó la incorporación de nuevas áreas y grupos de agricultores han comenzado a pedir la liberación para el cultivo de las tierras protegidas, añade.Por mucho que nos guste la producción de etanol, sobre todo el celulósico o de otras fuentes diferentes al maíz, sería un trágico error echar por la borda dos décadas de protección ambiental a cambio de ganancias de corto plazo, afirma The New York Times.La producción de etanol a partir de ese cereal reemplazará una pequeña fracción del petróleo que utilizamos y si eso se realiza al precio de una nueva locura en busca de tierras cultivables, será mayor la pérdida en conservación que la ganancia en independencia energética. (PL)
Destaca The New York Times reflexiones de Fidel
(Actualizado 5 de abril del 2007, 4:00 pm)
El influyente diario The New York Times destacó este jueves entre sus principales informaciones la crítica formulada por el presidente de Cuba, Fidel Castro, a los planes de Bush de incrementar el uso de alimentos como el maíz y la soya para la producción de etanol.
También enjuició el aumento sin precedentes del cultivo de maíz en Estados Unidos para producir etanol y apenas sustituir una pequeña fracción del petróleo que consume el país.
En un editorial titulado Las consecuencias del maíz, el rotativo comenta el desmedido interés de los granjeros por incrementar las tierras dedicadas a la gramínea, en su afán de obtener ganancias rápidas.El súbito vuelco hacia la producción de ese cereal se deriva de la política del presidente George W. Bush a favor de los biocombustibles, aun a riesgo de romper el balance agrícola de la nación, con una súbita baja de las áreas de soya o algodón, entre otras.The New York Times revela que este año los agricultores norteamericanos sembrarán de maíz 90,5 millones de acres (36,6 millones de hectáreas), es decir, 12 millones de acres (4,8 millones de hectáreas) más que el año pasado, la mayor área destinada a ese cultivo desde 1944.Las tierras destinadas a la soya disminuirán en más del 10 por ciento y lo mismo ocurrirá con el trigo y el algodón, agrega el diario.Además del peligro que esto entraña en relación con la producción de cereales para la exportación, el periódico apunta otros riesgos menos conocidos: la puesta en explotación de tierras que se encuentran sujetas a un programa de protección del medio ambiente.Se trata de unos 15 millones de hectáreas que fueron reintegradas a la naturaleza por ser muy montañosas, húmedas, o reservas de flora y fauna, que son conservadas por fondos aportados por los contribuyentes.El Programa de Conservación de Reservas ya paralizó la incorporación de nuevas áreas y grupos de agricultores han comenzado a pedir la liberación para el cultivo de las tierras protegidas, añade.Por mucho que nos guste la producción de etanol, sobre todo el celulósico o de otras fuentes diferentes al maíz, sería un trágico error echar por la borda dos décadas de protección ambiental a cambio de ganancias de corto plazo, afirma The New York Times.La producción de etanol a partir de ese cereal reemplazará una pequeña fracción del petróleo que utilizamos y si eso se realiza al precio de una nueva locura en busca de tierras cultivables, será mayor la pérdida en conservación que la ganancia en independencia energética. (PL)
Acusan de traicion al Partido Solidaridad Democratica por defender el "dialogo"
Acusan de traición al Partido Solidaridad Democrática por defender el diálogo
http://www.cubanuestra.nu/web/article.asp?artID=7439
El Partido Solidaridad Democrática (PSD) cree que lo inteligente es negociar, conversar Partido Comunista de Cuba (PCC), tal actitud es calificada de traición por los señores Lázaro González Valdés y César Alarcón, de SOS Justicia-Ex prisionero de Conciencia y MOVIMIENTO CUBANO UNIDAD DEMOCRÁTICA (MCUD) respectivamente.
En la última edición de Nuevo acción se publica una declaración de MCUD, firmada por Valdés y Alarcón, quienes entre otras cosas declaran las siguientes:
...El PSD -dirigido desde La Habana por Fernando Sánchez López- traiciona a las víctimas del comunismo cuando añade que quienes participen en los cambios (que hipotéticamente se producirían en Cuba como resultado de esa proposición del PSD) “deben hacer renuncia pública al ajuste de cuentas y a no pedir enjuiciamientos para los que cometieron atropellos y crímenes”. Sin embargo, en el sitio de Misceláneas de Cuba en Internet, Fernando Sánchez López declara demagógicamente que: “De ninguna manera estamos imponiendo nuestras ideas para que rijan los destinos de la futura concertación. Lo que estamos proponiendo es que entre todos los que participemos en este propósito redactemos el proyecto final y nos dispongamos a crear entonces una nueva alternativa unida de cambio para Cuba¡La falacia se evidencia, se confirma cuando Fernando Sánchez López asegura que no se impone ninguna idea pero condiciona el “no pedir enjuiciamientos para los que cometieron atropellos y crímenes” con la participación en el Anteproyecto del PSD! La declaración de SOS Justicia y del MCUD denunciando la traición del PSD a las víctimas del comunismo en Cuba fue enviada por correo electrónico a Misceláneas de Cuba para su publicación. También se le hará llegar esta nota por la misma vía. Esperamos que se publique nuestro punto de vista dondequiera que se difunda el Anteproyecto del
http://www.cubanuestra.nu/web/article.asp?artID=7439
El Partido Solidaridad Democrática (PSD) cree que lo inteligente es negociar, conversar Partido Comunista de Cuba (PCC), tal actitud es calificada de traición por los señores Lázaro González Valdés y César Alarcón, de SOS Justicia-Ex prisionero de Conciencia y MOVIMIENTO CUBANO UNIDAD DEMOCRÁTICA (MCUD) respectivamente.
En la última edición de Nuevo acción se publica una declaración de MCUD, firmada por Valdés y Alarcón, quienes entre otras cosas declaran las siguientes:
...El PSD -dirigido desde La Habana por Fernando Sánchez López- traiciona a las víctimas del comunismo cuando añade que quienes participen en los cambios (que hipotéticamente se producirían en Cuba como resultado de esa proposición del PSD) “deben hacer renuncia pública al ajuste de cuentas y a no pedir enjuiciamientos para los que cometieron atropellos y crímenes”. Sin embargo, en el sitio de Misceláneas de Cuba en Internet, Fernando Sánchez López declara demagógicamente que: “De ninguna manera estamos imponiendo nuestras ideas para que rijan los destinos de la futura concertación. Lo que estamos proponiendo es que entre todos los que participemos en este propósito redactemos el proyecto final y nos dispongamos a crear entonces una nueva alternativa unida de cambio para Cuba¡La falacia se evidencia, se confirma cuando Fernando Sánchez López asegura que no se impone ninguna idea pero condiciona el “no pedir enjuiciamientos para los que cometieron atropellos y crímenes” con la participación en el Anteproyecto del PSD! La declaración de SOS Justicia y del MCUD denunciando la traición del PSD a las víctimas del comunismo en Cuba fue enviada por correo electrónico a Misceláneas de Cuba para su publicación. También se le hará llegar esta nota por la misma vía. Esperamos que se publique nuestro punto de vista dondequiera que se difunda el Anteproyecto del
El Libro Negro del Comunismo
http://iblnews.com/view.php?id=461434
El Libro Negro del Comunismo
Las revelaciones de El Libro Negro del Comunismo CIEN MILLONES DE MUERTOS (Robert Laffont, París, noviembre de 1997; traducido al español por Planeta/Espasa, 1998) La reciente aparición en Francia de El Libro Negro del Comunismo ha puesto sobre el tapete uno de los más grandes tabúes de la vida pública europea: las responsabilidades criminales del comunismo. Los autores de estE libro demuestran, con los datos en la mano, que el número de muertos causados directamente por el comunismo en todo el mundo supera los cien millones de víctimas. A partir de ahí, las preguntas son inevitables: si el comunismo ha demostrado ser la doctrina política más criminal de la historia, ¿por qué nadie reclama un juicio para el comunismo? ¿Por qué el comunismo sigue gozando de cierta presentabilidad social? Al fondo es fácil descubrir prejuicios y tabúes. La realidad, sin embargo, es incontrovertible. "Le Livre Noir du Comunismo" es un estudio de tamaño considerable -846 páginas- en las que han colaborado varios autores y que está destinado a convertirse en obra de consulta obligatoria para todos aquellos que quieran profundizar en el fenómeno más trascendental del siglo XX: el comunismo. La traducción española ha corrido a cargo de un equipo dirigido por Cesar Vidal. Desde la aparición del clásico sobre el tema, la obra de Robert Conquest El gran Terror, nunca se había publicado un libro tan rico en datos como El Libro Negro del Comunismo. LAS CIFRAS DEL TERROR El Libro Negro es una compilación de colaboraciones de diversos especialistas. El director de la revista Comunismo, Stephane Coutois, estudioso del sistema marxista-leninista, es el autor del primer trabajo, breve pero enjundioso estudio a guisa de presentación de la obra. Se titula "Los Crímenes del Comunismo" y, entre otras cosas, ofrece esta relación del número de víctimas causadas por los sistemas y partidos comunistas en todo el mundo: PAIS O REGION MILLONES DE MUERTOS Unión Soviética 20 China 65 Corea del Norte 2 Camboya 2 Africa 1.7 Afganistán 1.5 Vietnam 1 Europa del Este 1 Iberoamérica 1 Movimiento comunista internacional y partidos comunistas en la oposición 10 Aunque en el libro se ofrecen diversas "contabilidades" , el total de víctimas del comunismo supera el número de 100 millones de muertos. En proporción con el número de habitantes, la mayor cifra corresponde a Camboya, donde Pol Pot exterminó a un tercio de la población. A estas cifras, Coutoirs suma lo que califica acertadamente como "crímenes contra la cultura". Stalin hizo demoler centenares de iglesias. Ceaucescu destruyó el corazón histórico de Bucarest para levantar nuevos edificios y trazar perspectivas megalomaníacas. Pol Pot hizo desmontar piedra a piedra la catedral de Phnom Penh y abandonó a la jungla los templos de Angkor. Durante la revolución cultural maoísta, fueron destrozados o quemados por los guardias rojos. ¿Cómo ha sido posible que los mayores genocidios de la historia no hayan merecido no ya un nuevo Nuremberg, sino, simplemente, la condena del mundo entero? Para Courtois, la impunidad de los crímenes del comunismo "no sólo fue posible por la fuerza de la Internacional Comunista y de los partidos comunistas locales", sino también por el silencio cómplice de muchos: "entre los años cincuenta y setenta, cientos de miles de hombres han incensado al gran timonel de la revolución China, por ejemplo, como antes ocurrió con Lenin y después con Stalin. El autor señala que los métodos puestos en marcha por Lenin respecto al terror -no olvidemos que Djerzinsky crea la CHEKA a los dos meses escasos del golpe de octubre, y que el gulag es creación leninista, luego perfeccionados por Stalin y sus émulos-, no sólo recuerdan en mayor escala los métodos nazis, sino que son muy anteriores. Pero después de 1945, la designación del nazismo vencido como "mal absoluto" hizo que "la victoriosa Unión Soviética" y el comunismo basculasen casi mecánicamente en el campo del bien" Por otra parte, insiste Courtois, "sus símbolos (bandera roja, La Internacional, puño levantado) resurgen detrás de cada movimiento social de envergadura. El Ché Guevara vuelve a estar de moda". La razón última la constituye la persecución de los judíos por los Nazis. Focalizando la atención sobre una atrocidad, se logra impedir la visión de otras realidades incluso más gigantescas en el mundo comunista. "¿Como imaginar –pregunta Coutois- que aquellos que mediante su victoria han contribuido a destruir un sistema genocida (1), hayan podido practicar también esos métodos?. EL CASO SOVIÉTICO Después de tan sustancioso prefacio, Nicolás Werth, profesor de historia dedicado al estudio de la URSS, titula la primera parte de la obra: "Un Estado contra su pueblo". En ella analiza las violencias, las represiones y el terror en la Unión Soviética. La tragedia sufrida por el pueblo ruso desde la implantación del terror rojo hasta la salida del estalinismo queda descrita con rigor y minuciosidad. El análisis del terror desde el establecimiento de la CHEKA -que posteriormente sería la GPU, la OGPU, el NKVD, la KGB.está muy pormenorizado. El autor lo señala como un terror no ciego y brutal, sino científica y fríamente aplicado. Nada de pasiones; habrá "excesos de celo", pero el terror será organizado. Y dirigido no sólo contra los combatientes del campo enemigo, sino contra los "enemigos del pueblo". Concepto tan amplio que permitirá exterminar a cualquier opositor. El objetivo no es exterminar sólo al enemigo combatiente, sino a la entera clase social a la que pertenece. Así, en las instrucciones a los chekistas se les dirá que no deben plantearse si el detenido es culpable o inocente, sino cual es su clase social. Por otra parte, este concepto de "enemigo de clase" será elástico, y en él también se incluirá a los trabajadores que osan discrepar del poder soviético y se defienden con el arma de la huelga: entre el 12 y el 14 de marzo de 1919, vencida ya la resistencia de los " Guardias Blancos", se ejecutará a unos dos mil obreros de Astraján -cerca de la desembocadura del Volga- que estaban en huelga. Para que el escarmiento sea mayor, se embarca a los huelguistas junto a prisioneros blancos, se les cuelga una piedra al cuello y se les arroja al Volga. Un procedimiento que tiene antecedentes en la Revolución francesa, en la represión de La Vendée. También serán communes las represiones contra los mineros y los marinos, como los de Kronstadt. Werth especifica con claridad y amplitud los métodos de la represión, su dureza, su acentuación con la guerra civil, la utilización del hambre como arma política, métodos que Stalin perfeccionarí a a mayor escala en los años treinta. Así se procede -señala el autor- a la "masiva confiscación de las cartillas de racionamiento, pues una de las armas mas eficaces del poder bolchevique será el arma del hambre". Este capítulo del hambre programada requiere mayor comentario. Ya antes de la revolución, Lenin había afirmado la necesidad de "destruir la economía campesina y provocar el hambre", pues esto nos acercará a nuestra meta socialista. El hambre destruye no solamente la fe en el Zar, sino también la fe en Dios". En 1922 declarará que el hambre era beneficiosa porque "golpea mortalmente la cabeza del enemigo", que era entonces la Iglesia Ortodoxa. Las crisis de las cosechas de 1927 y 1928 permitieron a Stalin abrirse camino hacia el poder absoluto e imponer la colectivizació n agraria forzosa. El hambre planificada en Ucrania entre 1932 y 1933 causará nada menos que seis millones de muertos. Los campos de concentración datan de fecha tan temprana como 1922. Se establecen en el archipiélago de las Solovki, cinco islas del Mar Blanco. "Los campos especiales del archipiélago de las Solovky -escribe Werth- serán la matriz de otro archipiélago en gestación, un archipiélago inmenso a la escala del país continente entero: el archipiélago Gulag". El autor aporta documentos originales, entre otros los correspondientes a la época del gran terror de los años 1936-38. El dossier de un acusado entre millones resulta esclarecedor: un modesto campesino es acusado porque su padre fue un rico comerciante- luego empobrecido- treinta y cuatro años atrás; por tal "razón" se le considera hostil al sistema soviético, es detenido, juzgado y ejecutado. Mención aparte merecen los desplazamientos de poblaciones enteras, como los efectuados durante la "deskulakizació n" de 1930 (los kulaks eran campesinos libres, no siempre de posición holgada, pero que sólo dependían de sí mismos). Los presos fueron transportados a miles de kilómetros de sus tierras en lentos trenes de mercancías en el interior de vagones de Ganado donde se hacinaban cuarenta personas y de los que no salían durante semanas. La mortandad fue terrible por la falta de higiene, el hambre, las enfermedades y el frío, durante semanas permanecían detenidos los vagones en estaciones de clasificación. Cada tren constaba de 53 vagones. Estos transportes se perfeccionarí an en los años siguientes, y especialmente entre el periodo 1943-44 cuando fueron deportados pueblos enteros (tártaros, Kirguises, kalmukos) sospechosos de connivencia con el invasor alemán. EUROPA Respecto a la parte dedicada a España, demasiado sumaria, el estudio está muy bien documentado de lo que concierne a la represión comunista contra la ultraizquierda durante la guerra civil: los anarquistas catalanes, el POUM, el asesinato de Andrés Nin. se evidencian los excesos represivos de Líster y el Campesino en Castilla. Se subraya cómo el ministro soviético Rosemberg asistía a los Consejos de Ministros del gobierno en 1938. Y se aportan tres datos esenciales: se confirma que la policía política del bando republicano se hallaba completamente controlada por la NKVD soviética; se insiste en el funesto papel de Dolores Ibárruri ( de la que se cita una ilustrativa frase: "Más vale condenar a cien inocentes, antes de que escape un solo culpable") y se demuestra el carácter total, única y exclusivamente estalinista de las Brigadas Internacionales. Es comprensible que los medios de la cultura oficial española, que todavía hace pocos meses homenajeaban sin continencia a las Brigadas Internacionales y la Pasionaria, hayan aireado poco el contenido de este Libro Negro. La parte tercera de la obra: "La Otra Europa, Víctima del Comunismo" está a cargo de Andrzej Paczkowsky, vicedirector del Instituto de Estudios Políticos de la Academia de Ciencias de Polonia y del Historiador checo Karel Bartosek. El primero de ellos analiza el terrible drama de su patria, Polonia, considerada por los soviéticos "nación enemiga". Paczowsky relata cómo incluso el propio partido comunista polaco fue objeto de purgas hasta un grado desconocido en otras latitudes; eliminado y deshecho por los camaradas de Moscú. Respecto a Bartosek, analiza la represión comunista en los otros países de la Europa del este: el exterminio de aquellos no ya opuestos al marxismo-leninismo, sino, simplemente, considerados "enemigos de clase", en Hungría, Rumania, Checoslovaquia, Bulgaria, Yugoslavia. Bartosek se interroga por qué los enormes crímenes cometidos permanecen impunes, abundando en la opinión de quienes sugieren un nuevo Nuremberg. Se ha afirmado hasta la saciedad que los "crímenes contra la humanidad" no prescriben, pero lo cierto -escribe Bartosek- es que "el castigo de los culpables no ha sido aplicado a tiempo ni de modo apropiado". El autor propone, a título personal, una solución que puede parecer algo utópica, como el procedimiento realizado en Alemania al abrir los archivos de la Stasi, la antigua policía política de la República democrática: responsabilizar a cada uno, a cada ciudadano, de instruir su propio proceso. ASIA: MASACRE Y REEDUCACIÓN Los comisarios de Asia ("Entre la Reeducación y la Masacre") constituyen la cuarta parte de la obra. Los historiadores Jean Louis Margolin y Pierre Rigoulot examinan el terror en China, Vietnam, Camboya y Laos. Los comunismos asiáticos, respecto a los europeos, presentan ciertas características especiales: la simbiosis entre sus particularidades propias y el marxismo-leninismo, la mezcla de soviétismo y nacionalismo. Así, quien porcentualmente ha sido tal vez el mayor criminal de la historia, el camboyano Pol Pot, unía a un marxismo-leninismo primitivo, poco adulterado, una peculiaridad del grupo jemer nada marxista sino clasista y aun discriminatorio, pues los jemeres se consideraban superiores a otras etnias camboyanas. Esta extraña combinación creó algo nuevo. Poseído por el afán de crear un hombre nuevo mediante el exterminio de gran parte de la sociedad, Pol Pot llevó su furor a consecuencias extremas. En Camboya se detiene y ejecuta de forma crudelísima a los "contrarrevoluciona rios": antiguos políticos, militares, periodistas, policías, funcionarios, profesores. Todos eran sospechosos simplemente por haber cursado estudios primarios. Algunos incluso -y esto resulta casi increíble-, por llevar gafas, pues tal cosa para Pol Pot, denotaba pertenecer a la intelligentsia , clase que debería ser exterminada para que los jemeres rojos creasen una nueva Camboya. En 1975, cuando Pol Pot toma el poder, la población camboyana se calculaba en unos seis millones de personas; en 1997, la población se reducía a tres millones ochocientos mil habitantes. Más del 30 por ciento de la población fue exterminada. De tal proporción que no hay Parangón en la historia. Los autores de esta cuarta parte dedican una especial y lógica atención al comunismo chino, y a esa trágica figura que fue Mao Tse Tung (Mao Zedong en la nueva grafía impuesta por el sistema comunista): sus numerosos crímenes, la implantación del Laogai --l gulag Chino- y su peculiar sistema de fábricas-prisió n, donde a la vez que se ejerce la reeducación de los presos, se les hace trabajar en condiciones infrahumanas para elaborar productos frecuentemente destinados a la exportación. Bajo las órdenes personales de Mao (el gran timonel) se elimina a todos los habitantes de Keichek, "enemigos de clase" , tras vencer en guerra civil a Chiang Kai Chek. Antes, durante la guerra con Japón, mientras las tropas de Chiang se desangraban frente al invasor Nipón, Mao se inhibe de la guerra y se reorganiza, se hace más fuerte y dedica el ochenta por ciento de sus fuerzas a afianzarse y a eliminar a los oponentes futuros. Después el triunfo maoísta en la guerra civil producirá millones de muertos en ejecuciones sumarias, generalmente públicas -tal y como se sigue haciendo en China en 1999- a modo de escarmiento, para atemorizar a cualquier hipotético disidente. En 1957, Mao, con el estúpido aplauso de los compañeros de viaje occidentales y tantos "tontos útiles", lanza el movimiento de las cien flores: "Dejad que cien flores florezcan", que cien escuelas de pensamiento discutan". Así asoman a la luz pública numerosos intelectuales con sus criticas al partido. Y entonces Mao golpea de forma inmisericorde a aquellos intelectuales que se atrevieron a romper su silencio. Unos cien mil intelectuales descubiertos como "derechistas" fueron enviados a Laogai. Capítulo aparte merecería la denominada revolución cultural de 1966, cuyo verdadero motivo era la "purga" en el interior del partido comunista y la aniquilación de los oponentes de Mao. La revolución cultural lanza a los "guardias rojos" -que ,a su vez ,serán aplastados en 1968 por sus "excesos" a la más tremenda destrucción: se pierden milenarias obras de arte, se destruye cualquier vestigio de confucianismo, se persigue a cualquier individuo que simplemente haya exteriorizado gustos refinados. Es el caso de un profesor de Música que interpretaba a Mozart: los guardias rojos le romperán las muñecas para purgar su delito. El Laogai se llena no sólo de "reeducados teng" , burgueses, sino de altos cuadros del partido: el mismo Deng Xiaopin será humillado públicamente y ridiculizado ante cientos de guardias rojos. A los intelectuales -catedráticos, investigadores, químicos, médicos, etc.- se los destina sistemáticamente a limpiar las letrinas de los campos de concentración. Y aún tendrán suerte: un millón de personas serán ejecutadas. TERCER MUNDO La quinta y última parte del Libro Negro está dedicada al tercer mundo. Sus autores son Pascal Fontaine , periodista especializado en Iberoamérica; el historiador Yves Santamaría, y Sylvain Boulouque. Resulta especialmente llamativo el caso del totalitarismo cubano, cuya eficacia en la represión sigue los acreditados métodos soviéticos. En lo relativo a los campos de concentración, en Cuba se crea una adaptación de las fábricas prisión Chinas o del gulag soviético: las UMAP (Unidad Militar de Ayuda a la Producción) donde son internados tanto los "enemigos de clase" como los "desviacionistas" en el seno del partido, sometidos a una durísima disciplina, torturas, subalimentació n, etc. Las UMAP terminarían siendo cambiadas de nombre y transformadas en prisiones de seguridad bajo el control de la policía política. También se analiza el fracaso del proyecto totalitario de Nicaragua, el terror -con evidentes similitudes camboyanas- de Sendero Luminoso peruano, los afrocomunismos de Etiopía, Angola y Mozambique, y el sufrimiento impuesto al pueblo de Afganistán. En definitiva El Libro Negro Comunismo es una obra de importancia capital. Naturalmente, la "policía del pensamiento" ha intentado silenciarlo, ya que no es posible negar las evidencias resaltadas: la "reeeducación" para conseguir el "hombre nuevo" ha sido una característica básica de la Unión Soviética de Stalin, de la China de Mao, de la Cuba de Castro; los crímenes de Pol Pot son horrendos, los inmensos sufrimientos causados al pueblo son innegables, no admiten discusión. Pero, por gigantesco que haya sido el daño, por enormes que hayan sido las cotas históricas de inhumanidad alcanzadas, los teóricos del " hombre nuevo" seguirán considerando que se trata simplemente, del duro precio a pagar -cueste lo que cueste- para lograr su objetivo. En una discusión mantenida por Lenin con algunos miembros del Comité Central, éstos le reprochaban que un determinado proyecto leninista se oponía a la realidad. Lenin les contestó: "lo siento por la realidad". Similar es la actitud de quienes, aun a estas alturas, siguen cerrando los ojos ante los crímenes del comunismo. Responder a este Post
El Libro Negro del Comunismo
Las revelaciones de El Libro Negro del Comunismo CIEN MILLONES DE MUERTOS (Robert Laffont, París, noviembre de 1997; traducido al español por Planeta/Espasa, 1998) La reciente aparición en Francia de El Libro Negro del Comunismo ha puesto sobre el tapete uno de los más grandes tabúes de la vida pública europea: las responsabilidades criminales del comunismo. Los autores de estE libro demuestran, con los datos en la mano, que el número de muertos causados directamente por el comunismo en todo el mundo supera los cien millones de víctimas. A partir de ahí, las preguntas son inevitables: si el comunismo ha demostrado ser la doctrina política más criminal de la historia, ¿por qué nadie reclama un juicio para el comunismo? ¿Por qué el comunismo sigue gozando de cierta presentabilidad social? Al fondo es fácil descubrir prejuicios y tabúes. La realidad, sin embargo, es incontrovertible. "Le Livre Noir du Comunismo" es un estudio de tamaño considerable -846 páginas- en las que han colaborado varios autores y que está destinado a convertirse en obra de consulta obligatoria para todos aquellos que quieran profundizar en el fenómeno más trascendental del siglo XX: el comunismo. La traducción española ha corrido a cargo de un equipo dirigido por Cesar Vidal. Desde la aparición del clásico sobre el tema, la obra de Robert Conquest El gran Terror, nunca se había publicado un libro tan rico en datos como El Libro Negro del Comunismo. LAS CIFRAS DEL TERROR El Libro Negro es una compilación de colaboraciones de diversos especialistas. El director de la revista Comunismo, Stephane Coutois, estudioso del sistema marxista-leninista, es el autor del primer trabajo, breve pero enjundioso estudio a guisa de presentación de la obra. Se titula "Los Crímenes del Comunismo" y, entre otras cosas, ofrece esta relación del número de víctimas causadas por los sistemas y partidos comunistas en todo el mundo: PAIS O REGION MILLONES DE MUERTOS Unión Soviética 20 China 65 Corea del Norte 2 Camboya 2 Africa 1.7 Afganistán 1.5 Vietnam 1 Europa del Este 1 Iberoamérica 1 Movimiento comunista internacional y partidos comunistas en la oposición 10 Aunque en el libro se ofrecen diversas "contabilidades" , el total de víctimas del comunismo supera el número de 100 millones de muertos. En proporción con el número de habitantes, la mayor cifra corresponde a Camboya, donde Pol Pot exterminó a un tercio de la población. A estas cifras, Coutoirs suma lo que califica acertadamente como "crímenes contra la cultura". Stalin hizo demoler centenares de iglesias. Ceaucescu destruyó el corazón histórico de Bucarest para levantar nuevos edificios y trazar perspectivas megalomaníacas. Pol Pot hizo desmontar piedra a piedra la catedral de Phnom Penh y abandonó a la jungla los templos de Angkor. Durante la revolución cultural maoísta, fueron destrozados o quemados por los guardias rojos. ¿Cómo ha sido posible que los mayores genocidios de la historia no hayan merecido no ya un nuevo Nuremberg, sino, simplemente, la condena del mundo entero? Para Courtois, la impunidad de los crímenes del comunismo "no sólo fue posible por la fuerza de la Internacional Comunista y de los partidos comunistas locales", sino también por el silencio cómplice de muchos: "entre los años cincuenta y setenta, cientos de miles de hombres han incensado al gran timonel de la revolución China, por ejemplo, como antes ocurrió con Lenin y después con Stalin. El autor señala que los métodos puestos en marcha por Lenin respecto al terror -no olvidemos que Djerzinsky crea la CHEKA a los dos meses escasos del golpe de octubre, y que el gulag es creación leninista, luego perfeccionados por Stalin y sus émulos-, no sólo recuerdan en mayor escala los métodos nazis, sino que son muy anteriores. Pero después de 1945, la designación del nazismo vencido como "mal absoluto" hizo que "la victoriosa Unión Soviética" y el comunismo basculasen casi mecánicamente en el campo del bien" Por otra parte, insiste Courtois, "sus símbolos (bandera roja, La Internacional, puño levantado) resurgen detrás de cada movimiento social de envergadura. El Ché Guevara vuelve a estar de moda". La razón última la constituye la persecución de los judíos por los Nazis. Focalizando la atención sobre una atrocidad, se logra impedir la visión de otras realidades incluso más gigantescas en el mundo comunista. "¿Como imaginar –pregunta Coutois- que aquellos que mediante su victoria han contribuido a destruir un sistema genocida (1), hayan podido practicar también esos métodos?. EL CASO SOVIÉTICO Después de tan sustancioso prefacio, Nicolás Werth, profesor de historia dedicado al estudio de la URSS, titula la primera parte de la obra: "Un Estado contra su pueblo". En ella analiza las violencias, las represiones y el terror en la Unión Soviética. La tragedia sufrida por el pueblo ruso desde la implantación del terror rojo hasta la salida del estalinismo queda descrita con rigor y minuciosidad. El análisis del terror desde el establecimiento de la CHEKA -que posteriormente sería la GPU, la OGPU, el NKVD, la KGB.está muy pormenorizado. El autor lo señala como un terror no ciego y brutal, sino científica y fríamente aplicado. Nada de pasiones; habrá "excesos de celo", pero el terror será organizado. Y dirigido no sólo contra los combatientes del campo enemigo, sino contra los "enemigos del pueblo". Concepto tan amplio que permitirá exterminar a cualquier opositor. El objetivo no es exterminar sólo al enemigo combatiente, sino a la entera clase social a la que pertenece. Así, en las instrucciones a los chekistas se les dirá que no deben plantearse si el detenido es culpable o inocente, sino cual es su clase social. Por otra parte, este concepto de "enemigo de clase" será elástico, y en él también se incluirá a los trabajadores que osan discrepar del poder soviético y se defienden con el arma de la huelga: entre el 12 y el 14 de marzo de 1919, vencida ya la resistencia de los " Guardias Blancos", se ejecutará a unos dos mil obreros de Astraján -cerca de la desembocadura del Volga- que estaban en huelga. Para que el escarmiento sea mayor, se embarca a los huelguistas junto a prisioneros blancos, se les cuelga una piedra al cuello y se les arroja al Volga. Un procedimiento que tiene antecedentes en la Revolución francesa, en la represión de La Vendée. También serán communes las represiones contra los mineros y los marinos, como los de Kronstadt. Werth especifica con claridad y amplitud los métodos de la represión, su dureza, su acentuación con la guerra civil, la utilización del hambre como arma política, métodos que Stalin perfeccionarí a a mayor escala en los años treinta. Así se procede -señala el autor- a la "masiva confiscación de las cartillas de racionamiento, pues una de las armas mas eficaces del poder bolchevique será el arma del hambre". Este capítulo del hambre programada requiere mayor comentario. Ya antes de la revolución, Lenin había afirmado la necesidad de "destruir la economía campesina y provocar el hambre", pues esto nos acercará a nuestra meta socialista. El hambre destruye no solamente la fe en el Zar, sino también la fe en Dios". En 1922 declarará que el hambre era beneficiosa porque "golpea mortalmente la cabeza del enemigo", que era entonces la Iglesia Ortodoxa. Las crisis de las cosechas de 1927 y 1928 permitieron a Stalin abrirse camino hacia el poder absoluto e imponer la colectivizació n agraria forzosa. El hambre planificada en Ucrania entre 1932 y 1933 causará nada menos que seis millones de muertos. Los campos de concentración datan de fecha tan temprana como 1922. Se establecen en el archipiélago de las Solovki, cinco islas del Mar Blanco. "Los campos especiales del archipiélago de las Solovky -escribe Werth- serán la matriz de otro archipiélago en gestación, un archipiélago inmenso a la escala del país continente entero: el archipiélago Gulag". El autor aporta documentos originales, entre otros los correspondientes a la época del gran terror de los años 1936-38. El dossier de un acusado entre millones resulta esclarecedor: un modesto campesino es acusado porque su padre fue un rico comerciante- luego empobrecido- treinta y cuatro años atrás; por tal "razón" se le considera hostil al sistema soviético, es detenido, juzgado y ejecutado. Mención aparte merecen los desplazamientos de poblaciones enteras, como los efectuados durante la "deskulakizació n" de 1930 (los kulaks eran campesinos libres, no siempre de posición holgada, pero que sólo dependían de sí mismos). Los presos fueron transportados a miles de kilómetros de sus tierras en lentos trenes de mercancías en el interior de vagones de Ganado donde se hacinaban cuarenta personas y de los que no salían durante semanas. La mortandad fue terrible por la falta de higiene, el hambre, las enfermedades y el frío, durante semanas permanecían detenidos los vagones en estaciones de clasificación. Cada tren constaba de 53 vagones. Estos transportes se perfeccionarí an en los años siguientes, y especialmente entre el periodo 1943-44 cuando fueron deportados pueblos enteros (tártaros, Kirguises, kalmukos) sospechosos de connivencia con el invasor alemán. EUROPA Respecto a la parte dedicada a España, demasiado sumaria, el estudio está muy bien documentado de lo que concierne a la represión comunista contra la ultraizquierda durante la guerra civil: los anarquistas catalanes, el POUM, el asesinato de Andrés Nin. se evidencian los excesos represivos de Líster y el Campesino en Castilla. Se subraya cómo el ministro soviético Rosemberg asistía a los Consejos de Ministros del gobierno en 1938. Y se aportan tres datos esenciales: se confirma que la policía política del bando republicano se hallaba completamente controlada por la NKVD soviética; se insiste en el funesto papel de Dolores Ibárruri ( de la que se cita una ilustrativa frase: "Más vale condenar a cien inocentes, antes de que escape un solo culpable") y se demuestra el carácter total, única y exclusivamente estalinista de las Brigadas Internacionales. Es comprensible que los medios de la cultura oficial española, que todavía hace pocos meses homenajeaban sin continencia a las Brigadas Internacionales y la Pasionaria, hayan aireado poco el contenido de este Libro Negro. La parte tercera de la obra: "La Otra Europa, Víctima del Comunismo" está a cargo de Andrzej Paczkowsky, vicedirector del Instituto de Estudios Políticos de la Academia de Ciencias de Polonia y del Historiador checo Karel Bartosek. El primero de ellos analiza el terrible drama de su patria, Polonia, considerada por los soviéticos "nación enemiga". Paczowsky relata cómo incluso el propio partido comunista polaco fue objeto de purgas hasta un grado desconocido en otras latitudes; eliminado y deshecho por los camaradas de Moscú. Respecto a Bartosek, analiza la represión comunista en los otros países de la Europa del este: el exterminio de aquellos no ya opuestos al marxismo-leninismo, sino, simplemente, considerados "enemigos de clase", en Hungría, Rumania, Checoslovaquia, Bulgaria, Yugoslavia. Bartosek se interroga por qué los enormes crímenes cometidos permanecen impunes, abundando en la opinión de quienes sugieren un nuevo Nuremberg. Se ha afirmado hasta la saciedad que los "crímenes contra la humanidad" no prescriben, pero lo cierto -escribe Bartosek- es que "el castigo de los culpables no ha sido aplicado a tiempo ni de modo apropiado". El autor propone, a título personal, una solución que puede parecer algo utópica, como el procedimiento realizado en Alemania al abrir los archivos de la Stasi, la antigua policía política de la República democrática: responsabilizar a cada uno, a cada ciudadano, de instruir su propio proceso. ASIA: MASACRE Y REEDUCACIÓN Los comisarios de Asia ("Entre la Reeducación y la Masacre") constituyen la cuarta parte de la obra. Los historiadores Jean Louis Margolin y Pierre Rigoulot examinan el terror en China, Vietnam, Camboya y Laos. Los comunismos asiáticos, respecto a los europeos, presentan ciertas características especiales: la simbiosis entre sus particularidades propias y el marxismo-leninismo, la mezcla de soviétismo y nacionalismo. Así, quien porcentualmente ha sido tal vez el mayor criminal de la historia, el camboyano Pol Pot, unía a un marxismo-leninismo primitivo, poco adulterado, una peculiaridad del grupo jemer nada marxista sino clasista y aun discriminatorio, pues los jemeres se consideraban superiores a otras etnias camboyanas. Esta extraña combinación creó algo nuevo. Poseído por el afán de crear un hombre nuevo mediante el exterminio de gran parte de la sociedad, Pol Pot llevó su furor a consecuencias extremas. En Camboya se detiene y ejecuta de forma crudelísima a los "contrarrevoluciona rios": antiguos políticos, militares, periodistas, policías, funcionarios, profesores. Todos eran sospechosos simplemente por haber cursado estudios primarios. Algunos incluso -y esto resulta casi increíble-, por llevar gafas, pues tal cosa para Pol Pot, denotaba pertenecer a la intelligentsia , clase que debería ser exterminada para que los jemeres rojos creasen una nueva Camboya. En 1975, cuando Pol Pot toma el poder, la población camboyana se calculaba en unos seis millones de personas; en 1997, la población se reducía a tres millones ochocientos mil habitantes. Más del 30 por ciento de la población fue exterminada. De tal proporción que no hay Parangón en la historia. Los autores de esta cuarta parte dedican una especial y lógica atención al comunismo chino, y a esa trágica figura que fue Mao Tse Tung (Mao Zedong en la nueva grafía impuesta por el sistema comunista): sus numerosos crímenes, la implantación del Laogai --l gulag Chino- y su peculiar sistema de fábricas-prisió n, donde a la vez que se ejerce la reeducación de los presos, se les hace trabajar en condiciones infrahumanas para elaborar productos frecuentemente destinados a la exportación. Bajo las órdenes personales de Mao (el gran timonel) se elimina a todos los habitantes de Keichek, "enemigos de clase" , tras vencer en guerra civil a Chiang Kai Chek. Antes, durante la guerra con Japón, mientras las tropas de Chiang se desangraban frente al invasor Nipón, Mao se inhibe de la guerra y se reorganiza, se hace más fuerte y dedica el ochenta por ciento de sus fuerzas a afianzarse y a eliminar a los oponentes futuros. Después el triunfo maoísta en la guerra civil producirá millones de muertos en ejecuciones sumarias, generalmente públicas -tal y como se sigue haciendo en China en 1999- a modo de escarmiento, para atemorizar a cualquier hipotético disidente. En 1957, Mao, con el estúpido aplauso de los compañeros de viaje occidentales y tantos "tontos útiles", lanza el movimiento de las cien flores: "Dejad que cien flores florezcan", que cien escuelas de pensamiento discutan". Así asoman a la luz pública numerosos intelectuales con sus criticas al partido. Y entonces Mao golpea de forma inmisericorde a aquellos intelectuales que se atrevieron a romper su silencio. Unos cien mil intelectuales descubiertos como "derechistas" fueron enviados a Laogai. Capítulo aparte merecería la denominada revolución cultural de 1966, cuyo verdadero motivo era la "purga" en el interior del partido comunista y la aniquilación de los oponentes de Mao. La revolución cultural lanza a los "guardias rojos" -que ,a su vez ,serán aplastados en 1968 por sus "excesos" a la más tremenda destrucción: se pierden milenarias obras de arte, se destruye cualquier vestigio de confucianismo, se persigue a cualquier individuo que simplemente haya exteriorizado gustos refinados. Es el caso de un profesor de Música que interpretaba a Mozart: los guardias rojos le romperán las muñecas para purgar su delito. El Laogai se llena no sólo de "reeducados teng" , burgueses, sino de altos cuadros del partido: el mismo Deng Xiaopin será humillado públicamente y ridiculizado ante cientos de guardias rojos. A los intelectuales -catedráticos, investigadores, químicos, médicos, etc.- se los destina sistemáticamente a limpiar las letrinas de los campos de concentración. Y aún tendrán suerte: un millón de personas serán ejecutadas. TERCER MUNDO La quinta y última parte del Libro Negro está dedicada al tercer mundo. Sus autores son Pascal Fontaine , periodista especializado en Iberoamérica; el historiador Yves Santamaría, y Sylvain Boulouque. Resulta especialmente llamativo el caso del totalitarismo cubano, cuya eficacia en la represión sigue los acreditados métodos soviéticos. En lo relativo a los campos de concentración, en Cuba se crea una adaptación de las fábricas prisión Chinas o del gulag soviético: las UMAP (Unidad Militar de Ayuda a la Producción) donde son internados tanto los "enemigos de clase" como los "desviacionistas" en el seno del partido, sometidos a una durísima disciplina, torturas, subalimentació n, etc. Las UMAP terminarían siendo cambiadas de nombre y transformadas en prisiones de seguridad bajo el control de la policía política. También se analiza el fracaso del proyecto totalitario de Nicaragua, el terror -con evidentes similitudes camboyanas- de Sendero Luminoso peruano, los afrocomunismos de Etiopía, Angola y Mozambique, y el sufrimiento impuesto al pueblo de Afganistán. En definitiva El Libro Negro Comunismo es una obra de importancia capital. Naturalmente, la "policía del pensamiento" ha intentado silenciarlo, ya que no es posible negar las evidencias resaltadas: la "reeeducación" para conseguir el "hombre nuevo" ha sido una característica básica de la Unión Soviética de Stalin, de la China de Mao, de la Cuba de Castro; los crímenes de Pol Pot son horrendos, los inmensos sufrimientos causados al pueblo son innegables, no admiten discusión. Pero, por gigantesco que haya sido el daño, por enormes que hayan sido las cotas históricas de inhumanidad alcanzadas, los teóricos del " hombre nuevo" seguirán considerando que se trata simplemente, del duro precio a pagar -cueste lo que cueste- para lograr su objetivo. En una discusión mantenida por Lenin con algunos miembros del Comité Central, éstos le reprochaban que un determinado proyecto leninista se oponía a la realidad. Lenin les contestó: "lo siento por la realidad". Similar es la actitud de quienes, aun a estas alturas, siguen cerrando los ojos ante los crímenes del comunismo. Responder a este Post
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