Por Juan Cuellar
Cuando uno cree que ha visto lo peor del periodismo en el Herald, este se encarga de demostrarnos que aun hay mucho por ver. Es como si el pasado escandaloso de este periodico no cuenta para nada. Lo mismo se puede decir de el programa A Mano Limpia, que de limpio no tiene ni un solo dedo, ni en las manos ni en los pies.
Ya habia escrito en este blog (La alcaldia de Hialeah") lo que observe el viernes pasado en la biblioteca John F. Kennedy de Hialeah con Elain de Valle, ex-reportera del Herald, pero lo que he visto hoy en el programa de Oscar Haza ha sido la tapa al pomo. Aclaro (es bueno aclarar para evitar confusion) que no me meto en politica local al menos que vea una relacion directa o indirecta con el regimen de la Habana, como en esta ocasion y agrego, porque ya lo habia dicho, que no veo el programa de Oscar Haza desde mi confrontamiento con el, en el Restaurant Versalles, por la cobertura que le habia dado en su programa durante su estancia en la estacion de radio La Poderosa durante el incidente de la paliza que le dio el alcalde Martinez al joven cubano. El, Oscar Haza, ni siquiera trajo al muchacho al programa y le dio los microfonos a Martinez para que se despachara a su antojo. Asi es el, pero esta noche un amigo me llamo para que viera el programa ya que ahi se encontraba el reportero del Nuevo Herald, Enrique Flor, un critico subrepticio de Carlos Hernandez y amigo de la ex-reportera Elain de Valle. Lea aqui cualquier articulo que le plazca de esta lista y vera si es cierto lo que el mismo Flor ha dejado fuera de cualquier duda en sus articulos y en el programa de television de su similar, Oscar Haza, un dia antes de las elecciones en Hialeah
El escandalo de los viejitos en "pampers, deformados e incapacitados' ha servido como prueba del ridiculo a que estan dispuestos algunos medios con tan burdo teatro y tan mala actuacion. Mientras Erika, la reportera del canal 41, atonita y airada ante tales imagenes y un Haza advirtiendo que la directora de la campana de Hernandez, Sasha Tirador no habia llegado al estudio, como una orden de "Accion" al drama. Las insinuaciones de investigaciones llovieron entre sonrisas picaras de Enrique Flor, reportero de El Nuevo Herald con imagenes desgarrantes detras de la cortina de humo en el escenario se esfumaron tan pronto llego la directora al estudio. Ahi se acabo el melodrama, y el cuento tambien.
Lo inconcebible es que a la hora de reportar el incidente, el periodista del Herald ni siquiera fue a pedir la opinion de la campana de Hernandez acerca del incidente, que mas que un deber es un requisito fundamental en el periodismo, ni la misma reportera del 41 lo hizo tampoco, tal vez hubieran evitado tal espectaculo, por lo que cabe preguntar: ?A que se debe tal comportamiento?
?Esta siendo utilizado este periodista investigativo por una colega devenida en bloguera investigadora de la campana de Martinez? ?Sera tan naive los otros reporteros?
?O es que se siente solidario con aquellos que creen que Posada Carriles es un "terrorista" y no pueden olvidar la llave de la ciudad que le diera Hernandez al patriota cubano, la firma como Presidente de la Comision al pedido del alcalde Robaina por la eliminacion de los intercambios culturales de Castro o por apoyar el "bloqueo yanqui"? ?Posiciones comun con Raul Martinez de algunos reporteros y editores del Herald y el canal 41? ?Casualidades? Nemesio.
Una Critica:
A la reportera del 41, demasiado melodramatica. Al reportero del Herald, excesivamente vago o malicioso. Al presentador, Carlucho lo hubiese hecho mejor. !Ah!, y a la bloguera de Martinez, hasta manana.
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